Solo tu - 𝒀𝑶𝑼

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   Una vez los tres habían entrado a el restaurante que había elegido Beck. Ella se acercó a pedir una mesa.

   El lugar era bastante bonito, tenía luces colgando por la terraza y las sillas y mesas tenían un color hueso bastante limpio. No había mucha gente , solo unas cuatro mesas de las diez que había estaban ocupadas. Allí ya había ido un par de veces a ese lugar con sus papas. Pero como ellos se encontraban de viaje ahora no podía invitarlos.

     —Ya tenemos mesa —anuncia Beck regresando con ellos.

   Todos se sentaron en ella había cuatro sillas y Joe fue el primero en sentarse seguido de Beck a su lado y Allí frente a ellos.

   A la menor le preocupaba ser el mal tercio al ver como su hermana y su novio comenzaban a hacer pequeños susurros y se daban pequeños besos en los labios. Allí trataba de mirar hacia otro lado pero prefirió sacar su teléfono y revisar las redes sociales en lo que los atendían.

    Joe sintió como Beck recargaba su cabeza en su hombro mirando hacia adelante y aprovecho para mirar a Allí con más detenimiento.

     —Hola bienvenidos a Cinnabon —un chico castaño aprecio llamado la atención de Allí—. ¿Puedo tomar su orden?

     —Si, claro. A mi me puedes traer un rol clásico con caramelo y nuez por favor... Y también un café descremado

   La primera en ordenar fue Beck. Y Allí ya sabía de dónde conocía a ese chico. Iba con ella en la escuela, aunque era un año mayor que ella. Lo había visto jugar en el equipo de beis bol en el campus. Y se habían saludado un par de veces en el pasillo. Pero no recordaba él todo su nombre.

     —Perfecto —murmuró el castaño anotandolo todo en la pequeña libreta con el logo del restaurante en la tapa.

     —¿Tu qué quieres, amor? —le preguntó Beck a su novio.

   Allí hizo contacto visual con el castaño y en seguida recordó su nombre. Se llama Evan. ¡Por supuesto! Ella un poco sonrojada apartó la vista de él concentrándose en la carta de alimentos. Y escucho como él reía levemente.

     —Yo solo quiero un café americano

   Respondió Joe y Allí sabía que había llegado su turno

     —¿Deseas ordenar algo, Allí?

   Todos se vieron sorprendidos y confundidos. Ella solo lo miró a los ojos de nuevo por unos segundos y comenzó a ordenar.

     —Am... Si... yo —tartamudeo un poco nerviosa—, Quiero en pie de manzana, por favor.

   El asintió y recogió sus cartas de pedido sonriendo y mirando a Allí una última vez antes de irse. Ella lo miró avanzar soltando un suspiro de alivio, había contenido la respiración sin darse cuenta.

     —¿Conoces a ese chico Allí?

   Preguntó Joe ganándose una mirada sorprendida de Beck. Pero su hermana quería saber lo mismo.

     —Si... él va a mi escuela.

    —Parece que le interesas —dijo Beck—. ¿Has hablado con él?

     —Solo un par de veces. Él es parte del equipo de béisbol .

     —¿Te uniste al equipo de porristas? —preguntó su hermana a lo que ella asintió divertida—, ¡Eso es fantástico Allí!

   Ella sonrió dándole la razón a su hermana. Joe permanecía en silencio admirando la conversación de las dos chicas.

     —Si el equipo de béisbol gana este año es posible que la escuela nos financie un viaje a Miami.