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LA MUERTE DE DUMBLEDORE

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Narra María Potter

La tarde siguiente subimos a la Torre de Astronomía, en todo este tiempo no he hablado con Harry, mientras nosotros subíamos escuchamos al profesor Snape discutir con el profesor Dumbledore---...no estoy negociando contigo Severus, aceptaste, no hay nada más que discutir

El profesor Snape dio grandes zancadas hacia las escaleras y se detuvo justo en el mismo escalón en el que nos encontrábamos, nos examinó de arriba a abajo con su mirada fría y siguió bajando, por nuestra parte subimos las escaleras y nos encontramos con el profesor Dumbledore, nos miró y exclamo con algo de sorpresa---oh mellizos, Harry debes afeitarte amigo mío---mi hermano se había estado descuidando este año, si no hubiera sido que yo le corte el cabello al estilo muggle ahorita lo traería como trapeador---a veces olvido lo mucho que han crecido, a veces veo a los pequeños niños de la alacena, perdonen mi sentimentalismo, soy un anciano

-yo lo veo igual que siempre---respondí con una pequeña sonrisa

-igual que tu madre desbordas gentileza---dijo---un rasgo que la gente siempre subestima me temo...el sitio al que viajaremos hoy es extremadamente peligroso, les prometí que podían acompañarme y me apego a esa promesa, pero con una condición, deben obedecer sin cuestionar cualquier orden que les de

-sí señor---respondimos al unísono

Su mirada ensombreció—- ¿entienden lo que les digo?, si les digo que se escondan, se esconden, si les digo que corran, corren, si les digo que huyan para salvarse, deben hacerlo...díganlo---nos miró con suplica

-lo haremos---respondimos de nuevo

-Tomen mi brazo---ordeno

-creí que no podía desaparecer dentro de Hogwarts señor---opine mientras ponía mi mano en su brazo

-ser yo tiene sus privilegios---respondió con su característico sentido del humor

Ya tomados de las manos desaparecimos de la Torre y aparecimos en lo que parecía ser una playa, las olas del mar y el viento estaban a todo lo que daban, pues la larga barba del profesor se sacudía con fuerza; un dato curioso fue que esta vez me dieron ganas de vomitar, lo bueno fue, que no comí nada antes de la aparición.

Ya tomados de las manos desaparecimos de la Torre y aparecimos en lo que parecía ser una playa, las olas del mar y el viento estaban a todo lo que daban, pues la larga barba del profesor se sacudía con fuerza; un dato curioso fue que esta vez me d...

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Finalmente entramos en una gran cueva, muy bochornosa y oscura---este es el sitio, oh si...ha habido magia en este lugar---de repente de su túnica supongo, saco un cuchillo y comenzó a cortarse la palma de su mano

- ¡¡señor!! ---exclamamos Harry y yo aterrorizados

-para lograr pasar se debe hacer un pago, un pago con la intención de debilitar a cualquier intruso---se excuso

-debió dejarme hacerlo---dijo Harry

-oh no, su sangre es más valiosa que la mía---aseguro

Paso su mano sobre las rocas y esta comenzó a abrir camino hasta que pudimos ver miles de cuarzos y cristales, con nuestra varita encendida comenzamos a caminar---Voldemort no dejaría que fuera fácil su escondite, habrá dispuesto varias defensas por todo el lugar---el profesor se detuvo, había frente a nosotros lo que parecía ser un lago---cuidado---lanzo un Lumos y este ilumino la pequeña isla al otro lado del lago---ahí esta

CARTAS---DRACO Y TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora