🌺Se acerca el baile de graduación!🌺

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Llegamos al hospital y entre lo más rápido que pude para preguntar por Jug.

Me dieron el número de habitación ¿tan grave fue?...

Betty estuvo conmigo en todo momento, cuando entramos Sweet Pea estaba sentado en la camilla viendo su celular, Jug no estaba allí.

—Pea!—Fui hacia el y lo abrace—y Jug? Donde esta Jug??? Dime qué está bien— Mi voz estaba temblorosa.

—Jug ya no esta aquí enana—Dijo Pea acariciando mi cabello.

Mis ojos se volvieron a cristalizar, no me gustaba llorar frente a los demás pero... Era mi hermano...

—Ya no esta aquí porque le están haciendo radiografía—Dijo Pea ahora riendo.

—Volví! Entre los muertos—Escuche la voz de mi hermano desde la puerta, cuando volteé a verlo tenía un brazo enyesado y varios golpes en el rostro— Aww ¿te importo tanto?

—Eres un idiota!—Iba a golpearlo, pero recordé que ahí estaba el doctor y que el pobre ya estaba demasiado herido— Que te pasó?

—Cuando iba a mi hora de almuerzo para encontrarme con Pea, no nos dimos cuenta, un compañero saco su auto de una forma muy brusca y me atropelló—Me explicó mi hermano—No fue tan grave, pero si me duelen las costillas y me rompió el brazo. Tendré que usar el yeso un buen tiempo—Dijo mi hermano mientras miraba el vendaje que tenía en uno de los brazos que no resultaron tan, herido.

—Me asustaste idiota! Betty me trajo rápido porque pensamos que estabas muerto—Dije restregando mis ojos—Me alegro que estes bien, idiota

—Que amor me tienes—Dijo Jug riendo.

—Señor Lodge, debe guardar reposo unos días—Sono la voz del doctor— Mínimo en lo que sanan varias heridas.

Mi hermano solo asintió ante las instrucciones del doctor.

Salimos del hospital. Pea nos llevó a casa, nos quedamos todos juntos un rato hasta que el novio de mi hermano tuvo que irse.

—Cómo te sientes?—Le preguntaba Betty a mi hermano mientras acomodaba una almohada en su cuello.

—Mejor, gracias Betty—Dijo mi hermano regalándole una sonrisa— ¿Porque no pude tener una hermana como tu?

—Oye! Yo te hice la cena—Dije haciendo un puchero—Deberías estar agradecido que no te he dado una paliza por casi matarme del susto.

—Betty contrólala—Rio mi hermano mientras veía a la chica que estaba sentada en uno de los sillones—No se cómo puedes tenerle paciencia a esta bestia.

—Eres muy chistoso—Dije volteando los ojos para sentarme junto a el—Chistoso y tonto.

—V, déjalo—Hablo la rubia tranquila— No ves que aún está herido por su accidente? Déjalo descansar.

—Esperare a que se cure para darle una paliza entonces—Bromee, nunca golpearía a mi hermano obvio, a menos que se lo mereciera.

Escuche como tocaron el timbre, iba a levantarme para ver quien era pero Betty se adelantó.

—Son los chicos—Escuche la voz de Betty desde la entrada.

—Déjalos pasar!—Grite, Jug solo me veía con una sonrisa—Tu que? El golpe te dejo mal?

—Grosera—Soltó una risa—Gracias por preocuparte por mi enana—Dijo mientras me daba un beso en la frente— Te quiero.

—Yo también—Le regale una sonrisa— Tonto.

Cartas para una rubia [Beronica] (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora