Prologo

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Harry Potter y sus personajes no me pertenecen.

"La oscuridad yace dentro de mí, solo esperando el momento para emerger."

1 de Septiembre de 1991

Miro con asombro el brillante tren de color rojo que se suponía lo llevaría a Hogwarts, sencillamente alucinante. Y no solo lo era el tren, lo era todo a su alrededor, todo parecía tan irreal.

-Un momento estaba en el orfanato, ahora estoy camino a una escuela de hechicería. —pensó sonriendo con ironía. –Bueno será mejor que me apresure a abordar.

Camino con calma, esquivando de vez en cuando al niño o adulto que se atravesaba en su camino. Mientras lo hacía escucho a un niño exclamar que había extraviado su sapo y a su abuela lamentarse, observo a una familia de pellirrojos despidiéndose. Fue en ese momento que mientras observaba su entorno que se descuidó y no miro al frente y casualmente tropezó con alguien haciéndolo caer de culo al suelo.

--¡Auch! Ten más cuidado, idiota. —una voz claramente femenina e infantil y por supuesto, irritada, le espetó.

Él se quejó de repentino golpe, pero rápidamente se recompuso y se puso de pie y rápidamente fue a ofrecerle ayuda a la persona con la que se había tropezado.

-¡Lo siento mucho! no estaba prestando atención—se disculpó tendiéndole la mano para ayudarla a levantarse.

La niña en el suelo lo miro con unos asombrosos ojos azul hielo que por un momento lo dejaron sin aliento.

--Claramente—murmuro la niña aceptando la ayuda. Era claramente rubia, piel blanca y realmente era bonita, muy bonita en realidad.

Rápidamente sacudió esos pensamientos, observo como la chica se sacudía sus ropas.

--De nuevo una disculpa, yo, bueno no preste atención y me distraje mirando a...--la niña levanto una mano en una clara señal para que guardara silencio, algo que el rápidamente hizo.

--No importa-dijo la niña rubia. Lo miro frunciendo el ceño. —Eres de nuevo ingreso, por lo que veo.

--Uh si, bueno, si lo soy...

-Bueno no importa, tengo que irme. —lo corto mientras le pasaba por un lado.

Los confundidos ojos verde esmeraldas del chico la siguieron y observo como esta se acercaba a un par de adultos, un hombre y una mujer y al lado de ellos, rebotando con obvia energía, una niña que parecía una copia en miniatura de la chica con la que acababa de tropezar.

--Uh sí, no vemos por ahí...--dijo en un susurro—Mi nombre es Harry...--añadió al final tristemente, pero rápidamente sacudió la cabeza.

Bueno, que buena primera impresión, pensó sarcásticamente. En eso escucho el silbato del tren y supo que tenía que apresurarse a entrar.

...

Cuando el sombrero termino de cantar, todos los estudiantes, incluidos los de nuevo ingreso (los que no estaban todavía envueltos de asombro por un sombrero cantando) aplaudieron.

Luego la mujer de aspecto severo, conocida como McGonagall con una lista en sus manos se enfrentó a la pequeña multitud de niños de once ansiosos.

--Cuando los llame, deberán colocarse el sombrero y sentarse en el taburete para que sean seleccionados en sus respectivas casas. —dijo—. ¡Abbott, Hannah!

Harry observo como uno a uno los alumnos iban pasando y eran enviados a las distintas casas, no fue hasta que cierto nombre fue llamado que presto verdaderamente atención, un rostro familiar y unos ojos conocidos captaron la mirada de Harry.

--¡Greengrass, Daphne!

¡Esa era la misma chica con la que se había tropezado en la estación! Descubrió de inmediato. Así que su nombre era Daphne.

--¡Slytherin!—exclamo el sombrero. La chica no mostro emoción alguna y camino con tranquilidad y elegancia hacia la mesa verde y plateada, la miro sentarse junto a una chica que recién también había sido seleccionada y noto como Daphne parecía conocerla.

Deben ser amigas desde antes, pensó Harry.

Entonces, después que pasaron unos nombres más Harry noto que se acercaba su turno más y más. Escucho como un niño pelirrojo y otro de cabello azabache hablaba entre sí.

--¡Potter, Charles!

Frunciendo el ceño, Harry noto como el gran comedor se quedaba en silencio un momento antes de estallar en susurros.

Curioso, tiene mi mismo apellido, pensó Harry mirando al chico caminar con confianza hacia el taburete y colocarse el sombrero que ni siquiera después de un minuto entero exclamo:

--¡Gryffindor!—

La mesa roja y dorada estallo en vítores y entre los vitoreo más fuertes estaban un par de pelirrojos, gemelos por el parecido, gritaban.

--¡Tenemos a Potter, Tenemos a Potter!

Harry no entendía por qué aquella reacción, pero era algo para averiguar más tarde, se encogió de hombros y espero a que lo llamaran.

--¡Potter, Harry!-por un momento, hubo una expresión de desconcierto en el rostro de la severa profesora, pero Harry no le prestó atención y se dirigió al taburete, noto incomodo como de nuevo el gran comedor quedaba en silencio un segundo y al siguiente estaban murmurando mientras lo miraban confundido.

¿Otro Potter?

¿Cómo es eso posible?

¿Estará relacionado con Charles Potter?

Tragándose su incomodidad, Harry se sentó en el taburete y puso el sombrero en su cabeza.

-Valla, valla, que tenemos aquí—escucho una voz que casi lo hace saltar de su asiento—Tranquilo muchacho, no hay por qué asustarse.

--¿Eres el sombrero?—pensó Harry--¿Estas...estamos hablando en mi mente?

--Se podría decir que si—respondió el sombrero. —Curioso, en verdad realmente curioso, tienes una sed por el conocimiento, quieres aprender, podrías ir a Ravenclaw, pero también quieres superarte, demostrar tu valía y coraje no hace falta, serias un buen Gryffindor pero eres ambicioso, eres leal pero solo a quienes lo merecen, quieres la grandeza quieres ser grandes...y es el lugar donde encontraras esa grandeza. Si, tienes que ser...

--¡Slytherin!

Harry Potter se puso de pie, sus túnicas ahora de verde y plateado con el logo de la Casa de la Serpientes impreso en ellas, trato de ignorar las reacciones de los demás, que lo miraban en silencio atónito, no fue hasta que un aplauso resonó en el gran comedor que los demás parecieron reaccionar.

La mesa de Slytherin fue reticente a aplaudir y mas de uno lo miro con el ceño fruncido. Pero la atención de Harry recayó en la mesa alta, donde encontró diferentes reacciones de diferentes personas que le observaban, un hombre claramente mayor, de gran barba y de túnica llamativa de color morada o algo parecido lo miraba mientras aplaudía, sus ojos azules centellantes, con un brillo intrigante en ellos, a su lado un hombre de cabello negro grasoso y vestido con una túnica negra ( si le preguntaban a Harry parecía un emo murciélago) miraba a Harry fijamente, como estudiándolo, vio a un hombre con turbante también mirándolo confundido, pero lo que le llamo la atención, fue una mujer pellirroja, que lo miraba fijamente,, con una expresión que no pudo descifrar en su rostro, pero lo que le llamo la atención fueron sus ojos, fue como si se estuviera observando en un espejo, por que aquellos ojos verdes eran idénticos a los suyos.

Que diablos esta pasando aqui, penso Harry confundido.

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Nota de autor: Hola como estas? espero que les alla gustado esta breve introduccion a esta historia, es la primera que escribo para esta plataforma, espero que si llegaron hasta aqui, les alla gustado.

cualquier critica construtiva es bien recibida, espero sus comentarios y recuerden si les gusto voten y compartan!

chau

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