-Vida-

04

La pelirroja se armó de valor & puso la mano en la puerta para abrirla, pero antes de abrirla se percató de que la voz que provenía de adentro le era familiar.

- ¿Papá Bruno? - susurró para después abrir la puerta - Papá Bruno!

- AAAHH - gritó Bruno asustado, causando que cayera de espalda en un sillón viejo que estaba ahí.

- Estás aquí! Estás vivo! - dijo para lanzarse a abrazar a su padre adoptivo, a quien no veía hace varios años.

- ______! ¿Cómo me encontraste? - dijo correspondiendo al abrazo.

- Vi a unas ratas irse para atrás del cuadro, & las seguí - dijo ______ llorando de felicidad.

- Ay no, ¿por qué lloras? - preguntó Bruno un poco alarmado.

- Creí que te habías ido al cielo, como mis papás - dijo la pelirroja secándose las lágrimas.

- Lo siento, pero tenía que irme brujita - dijo Bruno un poco triste por asustar a su hija adoptiva.

- ¿Pero cómo es que vives aquí? Estás siguiendo los pasos de Camilo, ¿verdad? - preguntó la niña.

- ¿Sobre qué? - preguntó el mayor confundido.

- Robas comida, ¿tu haces esos ruidos en la noche? - dijo la niña levantándose para explorar la "habitación" de su padre.

- Bueno si, soy yo, no le dirás a nadie que estoy aquí, ¿cierto? - preguntó Bruno preocupado.

- Claro que no, es más, yo te traeré tu comida - dijo la niña.

- ¿Qué? ¿A qué te refieres? - dijo Bruno.

- Si sigues saliendo es probable que alguien te vea, es arriesgado, mejor yo por las noches te traeré comida suficiente para el día siguiente, & así todos los días - dijo la niña poniendo su sonrisa a la qué Bruno no podía decirle que no.

- ¿& si te atrapan a ti? - preguntó el pelinegro.

- Eso no pasará - dijo la pelirroja - porfavor, déjame ayudarte.

- Agh, está bien, pero ten mucho cuidado para que no te atrapen brujita - dijo Bruno para plantar un beso en la cabeza de _____.

~Una semana después~

Ya había pasado una semana desde que ______ había descubierto el escondite de Bruno. La pequeña se despertaba todas las madrugadas, a las 2:00am en punto para ir a la cocina & robar algunas arepas & frutas, cuando iba al punto de encuentro con su padre, éste le entregaba un par de botellas vacías, que la niña rellenaba con agua para después dárselas & así volver a su habitación a dormir.

Era el cumpleaños número ocho de la pequeña pelirroja. Así que ese día despertó más temprano & fué a despertar a sus amigos, quedando reunidos en la habitación de Mirabel.

- ¿A qué horas será tu fiesta? - preguntó Mirabel.

- No lo sé, ni siquiera han comenzado a decorar, pero no importa, será más tarde - dijo _____ mirando por la ventana de Mirabel.

- ¿Me concederás un baile _____? - preguntó Camilo entusiasmado.

- ¿Ya sabes bailar? - preguntó la pelirroja recordando que en la última lección de baile no les había ido tan bien.

- Por supuesto! Soy Camilo el profesional - dijo haciendo una reverencia - le pedí a mi papá que me enseñara para tu cumpleaños.

- Oh, bueno, entonces si, bailaré contigo - dijo _____ emocionada.