Let's go to a new world

Rosa eléctrico

El desayuno no era la comida más importante del día, definitivamente no. Sobretodo si esos 20 minutos de desayuno los podías aprovechar en algo mejor como seguir durmiendo.
-¡Harry Styles, baja ahora mismo! - el grito instantáneo que provino de la sala me sobresaltó, pero ese fue mi ultimátum para echarme a andar con un pijama de dinosaurio. Al bajar las escaleras intentaba no caerme pues mis ojos seguían entrecerrados por el pesar de dormir.
-Buenos días, mamá. - Me senté en la primera silla que pude alcanzar.
-Harry, no puedes saltarte el desayuno y lo sabes. -Gruñí y balbucee algo que ni yo mismo entendí.
-¿Tienes exámen hoy, cierto? Puse en tu mochila una botella de agua y unos chocolates, dicen que eso mantiene tu mente activa. -Sonreí.
-Gracias ma.
-Hoy viene tu hermana Gemma de visita, dice que traerá pizzas para la cena.
- ¿Gemma de visita? Seguramente terminó con su novio... Como por quinta vez.
-Harry... - su tono de advertencia me hizo alzar las manos en señal de paz.

El silencio del momento me hizo querer aprovechar la oportunidad

-Mamá ¿Sabes que te amo demasiado? - una sonrisa angelical apareció en mi rostro.
-Al menos podrías terminar de desayunar antes de pedirme boletos para el concierto de One Direction.
-¿¡Cómo lo sabías!? - Ella rió.
-Bebé, es de lo único que has estado hablando estas dos semanas. -Hice un puchero.
-Pero ya solo faltan cuatro días para la preventa de boletos, dime por favor que ayudarás a tu pobre hijo desamparado.
-Harry bebé, me encantaría tener una excusa para decir que no, pero siempre has sido un niño que me mantiene orgullosa. - sonreí y solté un chillido de emoción. - Avísame cuando sea el día, así estaremos preparados los dos.
-Eres la mejor madre del mundo, y yo soy la persona más feliz. - Me levanté de la silla y con la cuchara que sostenía en mi mano empecé a cantar sin sentido mientras bailaba.
-Termina tu yogurth, es tarde. - mamá negó con la cabeza mientras sonreía.

No podía evitarlo, estaba obsesionado con ese grupo desde su primer single, y aunque acababan de comenzar en la industria musical tenían todo mi corazón y mi obsesión. Ellos me hacían sonreír todo el tiempo, cada foto, vídeo, entrevista, canción o cualquier cosa que saliera de ellos en internet era para mí lo mejor del mundo. Y Louis.... Que podía decir de Louis Tomlinson, sus ojos azules y su actitud de chico malo me hacían sentir muchas mariposas, y se sentía tristemente fatal cuando me daba cuenta que yo solo era un fan más del montón, pero siempre tendría un crush en él.

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Los días de examen en realidad eran los días más ligeros para mí, pues no teníamos ninguna clase. Solo llegábamos de entrada por salida y si terminabas tu examen de manera rápida era aún mejor.
Entonces aquí estaba, de camino a casa después de un aburrido examen de historia que solo fue un desperdicio de tiempo, pues el profesor Mark no tuvo descaro en hacer demasiado obvias las respuestas, incluso un idiota contestando al azar sacaría un 8 seguro.
Caminar era una de las cosas que mas me gustaba hacer, iba lento y sin prisa sintiendo el aire ligero refrescar mi rostro mientras escuchaba cada sonido que podía percibir, el tráfico en las calles, la gente hablando, el sonido de las hojas moverse y los niños riendo y columpiandose en el gigantesco parque por el que pasaba siempre.
Era ese tipo de sentimiento que me hacía querer poner el disco de Up All Night entero de fondo y cantar feliz hasta llegar a mi hogar.
Una notificación en mi celular hizo sacarme de mi tranquila caminata.
"Revista sunshine te explica cómo llegar a tu tan ansiado shifting ¡Sigue todos nuestros consejos y pronto estarás en casa!"
¿Shifting? ¿Casa? Estaba a cinco minutos de llegar a mi casa, no entiendo.
Intenté abrir el enlace pero al hacerlo me cobraba un dolar para adquirir toda la revista.
Pensé que las revistas ya no existían, es decir, toda la información que deseas tener se encuentra en el internet....
Entré al buscador con toda la calma y teclee "Shifting." Al segundo me apareció más de 30 enlaces con información sobre el tema, decidí abrir el primer link que aparecía.
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La noche llegó rápidamente, había frío por toda la casa y el chocolate caliente era perfecto en este momento. Sorbí un poco de mi taza y me acurruque en el sofá.
-Pensé que Gemma vendría hoy - comenté mientras observaba a mi madre leer un libro sobre belleza femenina.
-Dijo que saldrá tarde del trabajo, pidió disculpas y te manda un abrazo. - Aunque mamá no lo dijese en voz alta yo sabía que estaba un poco triste y decepcionada por el acto de mi hermana y aunque a mí no me sorprendía en lo más mínimo que haya cancelado de nuevo también me desanimaba un poco.
-La señora Maggie me pagó por arreglar su jardín el otro día, quisiera comprar una pizza para los dos. - Ella levantó la vista de su libro y por primera vez en toda la tarde la Vi sonreír.
-Si quieres pizza yo puedo comprarla. - negué.
-Quiero invitar esta vez, tengamos una noche de juegos y películas con pizza ¿Si? - hice el puchero al que ella no podía decir que no.
-Yo invito las palomitas - le sonreí y me levanté rápido para tomar mi celular y encargar la comida.
Desde que papá falleció, mi madre se encargó de cuidarnos sola, aunque con Gemma las cosas cambiaron, se convirtió en una versión muy diferente a quién era, salía de fiesta en fiesta, dejó de llegar a casa por noches, se metía en muchos problemas, y un día solo se fue con la excusa de querer ser independiente. A mamá le partió el corazón y yo me sentí abandonado. Solíamos ser muy cercanos y hacer muchas cosas juntos, pero ahora solo sé que la vi por última vez hace más de tres meses.
Desde ese entonces hemos sido solo mamá y yo, y aunque no me hace falta nada más, me gustaría mucho verla brillar de nuevo.