Los ríos necesitan claridad tras una devastadora tormenta

Melodia "Xicheng"

Pareja: Xicheng

Pov: Jiang Cheng queda atrapado entre la vida y la muerte, encontrandose con viejos recuerdos

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Jiang Cheng no sabía cómo había llegado a esa situación, había ido en compañía de su sobrino a una cacería nocturna y en el camino se encontraron con un grupo de discípulos de Gusu Lan.

Y de un momento a otro se encuentra atrapado en él bosque y zidian no ayuda al no hacerle caso, al menos puede estar seguro que su sobrino no entró en la posible matriz.

Empezó a caminar en busca de una salida, pero entre más caminaba sin darse cuenta más se adentraba, él bosque empezó a ser más espeso y la luz de la Luna ya no estaba en el cielo y los animales nocturnos dejaron de escucharse, pudo visualizar que al final del camino había una luz y comenzo a caminar más rápido llegando al punto de correr, cerrando los ojos por inercia debido a la luz cegadora, al abrirlos lo que encontró no fue nada más y nada menos que el muelle del Loto, pero no era el muelle que él construyó con ayuda de su gente y pocos discípulos, no, era el muelle que lo vio crecer... El mismo muelle en que paso los mejores momentos de su vida y también los peores, en ese muelle el que pudo convivir con sus hermanos, el mismo muelle que vio ser prendido con fuego sin poder hacer nada para evitarlo. Jiang Cheng quería irse, sabía que debía irse, pero la nostalgia, algo lo domo y comenzó a caminar.

El lugar estaba iluminado por los rayos del Sol cubriendolo con el familiar calor de Yunmeng, a los lejos podía escuchar las voces de los comerciantes y las risas de los niños y pequeños susurros de sirvientes y discípulos, Jiang Cheng quería llorar, el calor que lo acogió era tan nostálgico que sentía que en cualquier momento las lágrimas que no derramo en 15 años serían derramadas, siguió avazando sintiendo como algo o alguien lo empujaba a seguir haciendolo. Los discípulos que encontraban lo dejaban pasar como sino fuera nadie importante, camino sin importarle la dirección y simplemente siguió caminando hasta que estubo parado frente él salón principal dónde alguna vez comió con su familia, estaba a punto de irse cuando una risa lo detuvo, Jiang Cheng giro sobre sus talones y sin dejar que su cerebro procesará lo que acaba de escuchar abrió las puertas.

La risa se detuvo y el entorno cambio, las risas de los niños, las voces de los comerciantes y los pocos murmullos que se escuchaban desaparecieron para dar paso a un frío y silencioso lugar.

-Jie- Jiang Cheng no sabía como reaccionar la hermana que considera muerta se encontraba a unos pocos pasos de él, no, no sólo ella sino que también sus padres incluso él esposo de su hermana... Y sin saber cuando ya estaba siendo rodeado por un grupo de brazos. Mientras que el ruido de los comerciantes y niños se volvían a escuchar.

Oh... Jiang Cheng había olvidado esta calidez, no en primer lugar nunca la sintió... Pensó, Jiang Cheng quería devolver el abrazo encerio quería, pero fue una melodía la que lo detuvo y le susurro "esto no es real" "A-Cheng esto no es real".

-Una ilusión- susurro de vuelta apartándose del abrazo.

-¿A-Cheng?- escucho la voz de su hermana quien trato de tocarlo y él retrocedió.

Al levantar la mirada pudo verla de mejor manera, ahí estaba su hermana tal y como la vio la última vez, a su lado estaban sus padres con el aspecto que tuvieron antes de morir. Sus padres trataron de acercarse, pero el solo retrocedió más.

La melodía volvió a sonar y sintió como zidian cobraba viva. El anillo se transformó en látigo y marco una línea entre ellos, marcando él límite de donde podían llegar.

-¿Qué son?- pregunto con un tono feroz.

-Qué más podemos ser, somos tus padres pequeño mocoso- respondió su "madre" sin su habitual tono cortante.