Chicos en la adolescencia ❬BMF au ❭

Capítulo 1

Masamune miraba el reloj mientras mordía su lápiz, lo único que quería hacer en ese momento era salir del salón a toda velocidad y convencer a King de tener una batalla bey, aunque sentía como si una pequeña y molesta parte de su subconsciente le dijese que debía preocuparse de algo.

¡Toby y Zeo! Bueno, Zeo no ha vuelto y Toby tenía un control médico ese día así que no estaría en clases, aún así esperaba que Zeo llegase pronto para poder hablar de manera más clara el asunto, que ciertamente no le había gustado demasiado, aún así parecía algo comprensivo al ver los sentimientos de Toby involucrados, así que si Toby le hablase al menos podría seguirle al juego.
Su relación con Zeo se había hecho algo distante cuando, por motivos de trabajo de su madre, Masamune tuvo que mudarse y cambiar de escuela, aunque había algo que los unía y eso era el cariño que tenían por Toby, solamente que el de Zeo era a un nivel mucho más Romántico.

RING RING RING

El timbre de fin de clases sonó y de manera casi inconsciente salió corriendo de su salón en busca de King, quien estaba en segundo año, un piso más abajo de su salón. Correr por un pasillo en el que un montón de jóvenes salían a veces no era facil y siempre habría quejas pero ese día Masamune parecía no tener suerte. Había chocado con alguien, una chica de cabellos rojizos, Gina.

Una mirada pesada venía directamente de atrás de ella. Una mirada casi asesina.
Ryuga.

— Ten cuidado por dónde vas. —La voz gruesa y algo áspera de Ryuga hablo directamente hacia el.

Masamune quería hacer algún comentario gracioso o tonto solo para fastidiar pero nada le venía a la mente. Solo pensaba en King y el como quería decirle lo que le estaba aquejando en ese momento.

— Uhm, Ryuga. —La pelirroja tocó suavemente el brazo del albino— No tenemos tiempo ahora mismo, ya sabes tenemos que ir a ya sabes dónde. —El leve rubor en las mejillas de la muchacha la hacían parecer un tomate. Ryuga le dió una última mirada a Masamune y se fue junto a la muchacha.

La suerte del tonto a veces era útil. Más no entender algunas cosas realmente estaba siendo un fastidio en ese momento.

Busco en los estadios beys del patio, en el salón del muchacho, en la fuente vieja que a veces no funcionaba y se había pasado varias veces en donde estaban Tsubasa y Madoka conversando, aunque las siguientes a la segunda eran por el extraño sentimiento que le gobernaba a veces cuando les veía juntos. Si eso era lo que sentía Zeo cuando lo veía junto a Tony no podía culparle.

Pero ahí, caminando en el pasillo del fracaso y con olor a algo viejo vio salir a King junto a una muchacha de cabellos azabache y lentes.

— Recuerda hacer los ejercicios que he preparado para que te prepares para tu evaluación. Puedes llamarme o mandarme un mensaje si tienes alguna duda.

¿King se estaba esforzando en sus estudios?

Masamune intento disimular su presencia pero fue en vano, King se dió cuenta y fue directamente donde el. Mientras al frente de ellos la muchacha que ayudaba a estudiar a King se reunía con quién parecía su amiga.

— ¿Que haces aquí? Ya sabes, cerca de una biblioteca.

— ¡¡Eso debería preguntarte yo a ti!! Te he estado buscando todo este tiempo

— ¡Ya veo! ¿Quieres tener una batalla? ¡No te será tan fácil, he estado desarrollando una nueva técnica!

Antes de que Masamune contestará, de manera sigilosa una chica apareció al lado de King con una sonrisa divertida.

— ¡Boo!

El entusiasmo que tenía King en ese momento fue teñido de algún extraño nerviosismo que Masamune no sabía que King podía llegar a experimentar. Solo observó la escena sin decir nada, algo no usual en el.

— ¿H-hanae?

— ¿Quien más podría ser? ¿Tsukino? —El tono bromista de la joven de cabello corto hizo que una ligera sonrisa se dibujara en su amigo.

— Por supuesto, eres muy parecida a ella después de todo

La chica soltó una risita y le dió un suave golpe en el brazo a King— Ya quisieras. De todas maneras no he venido a eso — Hanae se enderezó y saco de la carpeta que traía en una mano una hoja— Es un formulario, que como el nombre dice tiene fórmulas, son para que te ayuden con tu evaluación.

— ¿para mí? —El muchacho de cabello algo azulado lo aceptó con entusiasmo— Con esto seguramente seré la mejor calificación.

Un largo y exagerado suspiro fue el que recibió commo respuesta, seguido de una risita— Deja de ser un fanfarrón —con eso llegó otro golpecito pero esta vez en el pecho— Bueno solo era eso así que ya me voy, te dejo hablar con tu amigo sobre lo asombrosa que soy y lo perdidamente enamorado que estás de mi —miro de reojo a Masamune para continuar rodando los ojos, su usual sonrisa pícara apareció y se fue riendo a dónde su mejor amiga.

Hubo un extraño silencio.

— Quiero hablar de eso, de esto en general, si no te molesta.

Fue Masamune el primero en hablar. Solo entonces King volvió a percatar su presencia.