【Te mereces que te besen, cada día, cada hora, a cada minuto....
——Suzuki Hayate】
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【Narra El/La Autor/a】
𝗛𝗔𝗕Í𝗔 𝗨𝗡 pequeño niño de 8 años con unos 1,19 centímetros de altura, cabello despeinado y de un color amarillo opaco. Ojos de diferentes colores, el izquierdo verde agua y el derecho rojo pastel. Cejas bastantes finas. Nariz pequeña, fina y recta. Labios de color rojo claro no son grandes, son húmedos, delgados y blanquecinos. Mejillas delgadas y un poco caídas, tiene un ligero tono de color rosa claro. Orejas de tamaño normal, no tan puntiagudas, solo un poco redondas. Varios lunares por su cara. Un lunar abajo del ojo izquierdo, otro arriba de la ceja derecha y otro más arriba del labio. Tiene una pequeña cicatriz vertical que pasa por el ojo derecho.
Esté pequeño chico estaba jugando en el parque cerca del departamento dónde vive con su madre.
Pobre niño jugando sólo en el parque, no tenía amigos según él le cuesta hacer amigos, no sabe si son por sus ojos de diferente color o por otra cosa.
Cambiando de tema antes el pequeño varón se enteró ayer de que había otro niño de su edad en el edificio, ¿Cómo lo sabe? Pues lo vió saliendo ayer del departamento de al lado con una mujer. Supone que será su madre.
Ahora mismo mientras está jugando tiene una batalla mental si hablarle al niño de su edad o no, piensa que lo va a tomar como un rarito o algo de ese estilo, además de que el pequeño es un poco tímido y no sabe si hablarle o dejarlo pasar.
Mientras el pequeño Hayate tenía su batalla mental, alguien lo estaba llamando, repetía y repetía su nombre, pero el pequeño estaba tan concentrado en sus pensamientos que ni se había dado cuenta que lo estaba llamando una voz femenina.
