Sincerity

Parte 4

Siempre he odiado los espejos, o por lo menos desde que tengo memoria. Mi relación con ellos es muy frágil y dolorosa. 

Pero creo que en realidad esa relación no nació de la nada, y no fue de un día para otro. Este sentimiento apareció con el pasar de los años, de las miradas, de los comentarios y de los millones de estereotipos que siempre estaban presentes a mi alrededor. Las personas crearon este sentimiento negativo por los espejos, y mas que los espejos, es por mi reflejo. 

Crecí sabiendo que no era linda, porque al momento de socializar y de hacer parejas siempre prefirieron a alguien mucho más linda, mucho más popular, mucho más femenina. Trate de decirme a mí misma que creyera en las palabras de las películas, "yo tengo otro tipo de belleza" repetía a mi reflejo cada noche, cada día.

Y los años pasaban y nada cambiaba, continue siendo invisible y cada vez era más difícil mantener mi autoestima con frases tan irreales. Mis inseguridades crecieron con cada palabra que dirigian a mí, y nadie se dio cuenta de lo marcada que me dejaron. Y tal vez sus intenciones no siempre fueron malas, pero cada "estas muy flaca", "tienes muchos pelos", "no te vistes tan bien" se quedaron en mi cabeza, girando sin parar. Trate de ahogar todo con música a todo volumen, con películas y libros que me llevaran a otra realidad. lo intente todo pero seguían ahí, el tiempo paso y nada se curó.

Las heridas seguían ahí, pero comenzaron a ser mas grandes...
"las estrías  se ven mal"
"estas subiendo de peso"
"los pantalones ya no te quedan"
"Ya no tienes una cintura perfecta"

Nunca pararon. Nuevamente se fueron dejándome llena de inseguridad y odio a mi propio cuerpo. Trate de borrar sus palabras del espejo y sobre mi reflejo, pero no puedo. 

Mis pantalones siguen en mi armario, llenos de polvo. Y en mis redes solo veo a chicas librándose de todos los complejos, pero yo sigo aquí, sigo aquí  atrás, bajo una falsa sonrisa. Sigo sin mirar mi espejo, sigo sin amar mi reflejo...