Capitulo 27: Cuidando Nuestras Espaldas

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Se podía ver a un grupo de pokémons en la orilla de una playa

Juan: Muchas gracias amigo

Steve: No hay problema y a la próxima intenta no rostizarnos -dijo de manera divertida-

Juan: Hecho

Steve: Bueno aquí me despido ¡Nos vemos!

Juan y Mia: Hasta luego

Narrador

El Zeraora y la Servine vieron como su amigo se iba por el agua mientras se perdía a lo lejos, ambos vieron los sacos de baya y cada uno tomo uno para luego empezar a caminar

Mia: Que lastima que solo hayamos conseguido dos -dijo la tipo planta mientras llevaba el saco con su látigo cepa-

Juan: Bueno, es mejor que nada -con una sonrisa- además prefiero esto a ser capturado

Mia: Jeje tienes razón -también con una sonrisa- vamos, tenemos que llevarle esto a Maya. De seguro nos estará esperando por algún lado de este bosque

Ambos vieron el bosque en frente suyo y tomaron camino hacia este mientras llevaban los dos sacos, ambos comenzaron a hablar de cosas triviales para no aburrirse mientras caminaban hasta que la Servine hizo una pregunta al tipo eléctrico

Servine: ¿Entonces Cresselia te ha visitado en tus sueños?

El Zeraora giro su cabeza para verla directamente y luego asentir

Juan: Por supuesto ¿Pero a qué va la pregunta?

Mia: Bueno, se supone que Cresselia solo aparece en tus sueños para curarlos de las pesadillas ¿Acaso le hiciste algo a Darkrai para tener tantas pesadillas?

El Zeraora se detuvo haciendo que la tipo planta haga lo mismo, este se perdió en sus pensamientos, la razón de que tuviera tantas pesadillas no habría sido por Darkrai

Mia: Oye ¿Estas bien?

Todavía recordaba esos momentos de su antigua vida... No lo superaba, eso hacía que tuviera varios recuerdos de sus padres de su antiguo mundo y al igual que de sus amigos, esas pesadillas que aún lo atormentaba... Ver a morir a sus antiguos padres, no poder hacer nada, se sentía tan inútil

Juan: Yo... Mejor sigamos -dijo mientras se daba la vuelta y empezaba a caminar-

La Servine estaba preocupada, no sabía que pasaba con su amigo, pero ciertamente no parecía bueno

Mia: (Quizás no debí haberle dicho eso)

Ambos siguieron su camino en un incómodo silencio, la Servine intentaba romper el ambiente intentando una conversación pero no se le ocurría nada mientras que el Zeraora intentaba pensar en otra cosa mirando a su alrededor para poder distraerse

Juan: ¿Cuánto crees que falte? -pregunto queriendo saber cuánto faltaba para encontrarse con Maya-

Mia: No falta mucho -respondió ella-

Y nuevamente el ambiente se llenó de un incómodo silencio, hasta que después de caminar unos cuarenta minutos llegaron hasta un claro, ambos miraron a su alrededor, un lugar tan hermoso con unas flores en el centro mientras algunos de los pokémon salvajes jugaban, pero luego uno de los pokémons salvajes los noto

Combee: ¡Intrusos!

Rápidamente ambos fueron rodeados por un gran grupo de pokémons que lo miraban de forma sospechosa, tanto el Zeraora como la Servine observaban la situación, escapar ya no sería posible, tomando poses de combate se estaban preparando para luchar hasta que...

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