Único

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Los gritos desgarradores acompañado de el fuerte sonido de unos puños chocando contra un rostro ya desfigurado hacen eco en ese almacén abandonado, situado cerca al mar, donde después ese cuerpo será desechado

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Los gritos desgarradores acompañado de el fuerte sonido de unos puños chocando contra un rostro ya desfigurado hacen eco en ese almacén abandonado, situado cerca al mar, donde después ese cuerpo será desechado. Esa pobre alma en pena está pasando por la golpiza de su vida, la última que va a recibir, tiene el cuerpo pequeño, delgado y aparentemente débil de un pelinegro de ojos azules que era su líder sobre su abdomen mientras puño tras puño van llegando a su cara.

El hombre desfigurado fue tan inteligente de vender información de la organización a una pandilla reciente, en su mente iba a funcionar, tristemente para él y sus cómplices, fueron descubiertos por uno de los ejecutivos.

Todos lo ejecutivos presencian como es que ese tipo será asesinado sólo por golpes, algunos con algo de envidia por que ese hombre tiene al Hanagaki sobre él, con esa sonrisa tan atractiva.

Haruchiyo es el miembro que siente más recelo y envidia en este momento, su amado jefe está sobre otro hombre, golpeando una y otra vez, tanto que la sangre de esa sucia rata cae sobre su piel de porcelana, siente tanta envidia en estos momentos, él quisiera estar ahí siendo sometido por el ojiazul, que lo mire con esos ojos llenos de ira y esa sonrisa desquiciada.

Un par de golpes más se oyen en el lugar, los cómplices del tipo que acaba de morir ven aterrados como es que a puño limpio Hanagaki asesino a un hombre mucho más grande y aparentemente más fuerte que él. Se levantó del cuerpo inconsciente del hombre y caminó hasta una mesita en la que se encontraba su arma pero no la tomó, de los otros tipos se encargarían sus subordinados, lo que sí tomó en sus manos es una cajetilla de cigarros, sacó uno y lo acercó a sus labios, comenzó a buscar un encendedor en su camisa, luego fue por su saco que era sostenido por Inupi, al final busco en los bolsillos de su pantalón, todo eso bajo la expectante mirada de Haruchiyo y los demás ejecutivos, claro también los hombres atados ahí.

El pelirrosa se caracteriza por se un caballero, solo con Takemichi, así que se acercó y le ofreció fuego a su amado líder, este lo aceptó acercando la punta de su cigarrillo aún en sus labios al encendedor que Haruchiyo le ofrecía.

—Tienes una mancha aquí—sacó un pañuelo y limpio la mejilla del ojiazul, este último solo exhalo el humo de su cigarrillo sobre el rostro de su amante.

Do you accept?~SanTakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora