Un pequeño en Gusu Lan

•°•°•¡¡Ho por Dios!!•°•°•

I

Lan QiRen de encontraba caminando a grandes zancadas hacia Jingshi para poder darle una gran regañada al "remolino", esposo de su segundo sobrino, por haber echo un ruido excesivo la noche anterior, haciéndo que el mismo no alla podido dormir por el gran ruido...pero...¿Por qué? Si su sobrino se encontraba fuera de Gusu por algo que le ordenó el mayor.

Llega a dicha parte y toca la puerta, dentro se escuchó un "toc, toc" junto con unos ronquidos.

Estubo esperando unos minutos desconocidos hasta que su paciencia se agota, abre la puerta y de encuentra con; papeles regados por todo el suelo, talismanes en varios lugares y un Wey WuXian ocupando toda la cama mientras dormía plácidamente... probablemente se alla quedado dormido hace poco

—¡¡Wey WuXian!!— fue lo que se escuchó al rededor de un radar de 10 metros, QiRen lo recordó para auto-castigarse personalmente luego

Wey Ying sobresalta haciéndolo caer en el suelo y ganarse un gran golpe

—¡Haiya!, Tío QiRen, ¿Por qué tan enojado tan temprano?— susurra por qué estaba seguro que si lo decía en voz alta terminaría copiando las reglas, con un bostezo se levanta del suelo —¿Paso algo? ¿¡Ya llegó Lan Zhan!?— con una radiante sonrisa —¡Voy a ver-...!—

Cuando estaba a punto de irse se escucha como una explosión detrás de su espalda, se la vuelta lentamente hasta que se encuentra con un niño..¿¡QUE!?, ¿¡UN NIÑO?!.. de aproximadamente unos 4 años sentado en el suelo

—Ohh...mierda..— comienza a dudar frío cuando verlo que su mano estaba inconciente mente uno de los talismanes del de ropajes negros —¿T-tío QiRen...?—

—¿Pol que me dices tío?— pregunta curioso el niño ladeando la cabeza un poco a la izquierda —¿Quien eles?, Y, ¿Pol qué sabes mi nombre?, Si te conosco peldón, no lo recueldo..— junta sus dos manos para hacer una reverencia

—N-no tiene que preocuparse tí-..QiRen— ríe nerviosamente el del listón rojo

—¿Sabe dónde se encuenta mi hermano?— Curioso, seguía sentado en el suelo por qué sus túnicas le quedaban exageradamente largas

—Ehh...— no sabía que responder hasta que una gran idea cruza por su mente —¡¡Zewu-Jun!!— grita antes de tomar al niño en brazos, cubrirlo bien, salir de Jingshi y comenzar a correr

—no glitar, no coler en los recesos de la nube— le regaño bajo QiRen, ya estaba rompiendo dos reglas el muchacho

Los discípulos miraban asombrados y curioso a Wey WuXian por estar despierto a tan temprana hora y por qué también traía a un niño en brazos.

Wey WuXian entra a la oficina de Lan Xichen sin importarle haber tocado

—¡¡Cuñado!!— grita el del listón rojo agitado por haber corriendo lo más rápido que le daban sus piernas —es urgente—

—joven Wey— suspira levemente con una sonrisa para prestarle atención —¿Algo que quiera informar?— mira curioso no tan solo las túnicas blancas si no también el niño que lo observaba en silencio —disculpe pero..¿Y ese niño?

Antes de que Wey Ying dijera algo, QiRen se presenta —disculpe, me presento, mi nomble es Lan QiRen, hermano menor de Qinghen-Jun— hace una reverencia un tanto difícil por qué WuXian lo sostenía con fuerza y cuidado

Al escuchar tales palabras Lan Xichen abre tan grande la boca, sorprendido y confundido

—¿Lan Q-QiRen...?— tose un poco antes de volver a pronunciar las mismas palabras —¿Lan QiRen?