Corre que no hay descanso en esta vida.
El único descanso es la muerte y no es buscada.
Corre hacia el silencio, huye del ruido cercano.
Lo que tengas que hacer hazlo,
pero tomate tu tiempo.
Tampoco te duermas, despierta de un coma profundo
ya que el tiempo vuela como un colibrí.
El batir de sus alas a sesenta veces por segundo,
marcan los mismos segundos que hay en un minuto.
El tiempo vuela y cada vez más rápido,
así que no lo pierdas que luego es complicado de alcanzar.
Corre saltando vayas,
que son los obstáculos del destino
o a veces el destino te hace tropezar en ellos.
Camina hacia el destino
porque te esperara, sea malo o bueno.
Hay quien dice que los hilos del destino los cosemos nosotros
y es cierto...
Lo hacemos sin darnos cuenta como coser y cantar.
Corre, atrévete a hacer todo aquello que deseas,
porque lo que deseas es lo que ansias,
lo que ansias es lo que buscas
y cuando lo buscas exhaustivo lo encuentras.
No corras del miedo, corre hacia él.
No corras del susto, asusta sus propósitos.
No corras del amor, déjate llevar.
Corre pero hazlo sin mirar atrás.
Corre como Forrest Gump, sin prestar atención a los malos rumores.
Que no te atemorice lo que puedan pensar de ti.
Tu vida, tú la tienes que vivir.
¡CORRE! Tú solo corre.
