Little cat. ‹𝟹 Sungsun

07

Sunghoon suspiró con nerviosismo, demasiados nervios atormentaban su cuerpo desde que decidió que por fin se declararía al pequeño rubio, se había dado cuenta hace poco, además de que aquel primer beso entre ambos, (porque no era el primer beso de Sunghoon, era el primer beso de Sunoo) pasaron más y más besos.

Y de repente respiró ese lindo y relajante aroma de Sunoo, a pesar de que era un poco raro, Sunoo tenía un rico aroma que todos notaban, a nadie le desagradaba, era un olor totalmente relajante. Había llegado a su departamento.

— SUNGHOON HYUNG UN GATO EN CELO ME ESTÁ PERSIGUIENDO. —chilló al otro lado de la puerta. Sunghoon le abrió y en menos de unos segundo tenía el suavecito cuerpo de Sunoo encima del suyo.

— Pesas, Sunnie. —rió antes de sentir cómo el peso encima de él desaparecía unos segundos antes de escuchar un fuerte portazo y seguido de eso volver a sentir esas manitos pequeñas abrazándolo, aunque por sus bracitos no podía abrazarlo por completo, lo que hizo que Sunghoon bufara de ternura, antes de corresponderle el adorable abrazo entre ambos.

Y sintió como los pompositos labios del gatito se estampaban contra los suyos, iniciando un amoroso beso.

Las manitos del rubio estaban en el cuello del pálido, acercándolo más a él, mientras se separaba unos segundos solamente para soltar dulces risitas.

— Hyung, me había llamado, ¿Para qué? —preguntó con emoción, mientras peinaba su rebelde cabello que estaba esparcido desordenadamente, seguramente mientras huía de aquel gato en celo.

— Bueno, Sunoo, quería decirte algo. —exclamó con un poco de vergüenza, antes de comenzar a jugar suavemente con la colita del menor.

— Dígame, dígame, dígame. —rió con dulzura, antes de presionar su naricita de botón y chillar: "¡mire hyung, soy un gato-cerdito!".

— Sunoo. —le sonrió, estaba decidido.

— ¿Qué, Hoonie? —canturreó mostrándole esa linda sonrisa donde sus ojitos desaparecían y mostraba sus dientes blanquitos.

— Estoy enamorado de ti.