Sangre Bendita

Capítulo 11: Monstruos

***A pesar de mis planes de eventualmente poseer cosas, Harry Potter nunca será uno de ellos. ***

§ ParselLengua§

***HPBB***

Con eso, Neville se giró y empujó a Harry hacia el túnel, antes de que se cerrara detrás de él. Segundos después, sus limitados instintos de supervivencia se activaron y logró esquivar el camino de un hechizo lanzado por su antiguo maestro.

***HPBB***

"Sabes..." Preguntó el ex profesor de defensa mientras rodeaba a su 'oponente' lenta y metódicamente, como lo haría un depredador con su presa. "Creo que cometiste un pequeño... error... Longbottom. Fue muy propio de Gryffindor quedarte atrás y enfrentarte a alguien muy superior a ti, pero... bueno, realmente no tienes ninguna posibilidad de derrotarme. Mi pregunta ahora es ¿por qué molestarse? ¿Por qué no empujar a Potter a la cámara y salvarse?

"¡P-porque t-eres un ladrón y un cobarde!"

El hombre mayor se rió, su risa llenó la habitación. "Oh, por favor... ¿el niño temeroso que apenas puede hablar correctamente o sostener su varita sin temblar me está llamando cobarde?"

De hecho, Neville había estado temblando un poco desde que su plan se puso en marcha. "N-no dejaré que te salgas con la tuya con esto".

"Oh, estúpido muchacho... Ya lo he hecho. ¿Cómo crees que soy el mago vivo más famoso en este momento? Olvídate de Potter o Dumbledore, Lockhart es el nombre familiar de hoy".

"¡V-vamos a ver eso!"

***HPBB***

Cuando Harry se deslizó por el túnel y finalmente llegó a una caverna iluminada por antorchas, miró hacia atrás, deseándole suerte a Neville en silencio y, recordando su propia promesa, continuó avanzando.

El agua de origen desconocido cubrió casi todo el suelo, dejando como transitables solo los pasillos a lo largo de las paredes. Sin embargo, Harry continuó, los recuerdos de una joven pelirroja firmemente en su mente. Una niña pequeña que era demasiado tímida para su propio bien, incluso con alguien como él. Una chica que no tenía nada que hacer en un lugar tan terrible.

Alguien que necesitaba ser salvado.

Eventualmente llegó a una cámara separada, donde podía escuchar susurros desde adentro.

"Pronto, mi venganza contra este agujero infernal estará lista. Los sangre sucia estarán muertos y los inferiores se inclinarán ante mi grandeza".

Aunque no reconoció la voz, Harry estaba seguro de que era un estudiante, la voz era demasiado joven para ser un adulto o un maestro.

Mirando en el niño-que-vivió notó a un niño parado cerca del primer año boca abajo que había venido a salvar.

Era hora de actuar.

***HPBB***

"Vamos, seguramente puedes hacerlo mejor que eso. ¿Por qué no pruebas mi técnica patentada para tratar con vampiros como expliqué en mi..."

"Porque no eres un vampiro... ¡Además, nunca leí ninguno de tus estúpidos libros!"

Lockhart frunció el ceño, antes de que un hechizo explosivo rápido lanzara al chico más joven a través de la habitación. Realmente ya era hora de que él siguiera adelante. Si Potter de alguna manera lograba descubrir una manera de tener éxito, entonces su presencia y su plan serían revelados de inmediato.

Al volverse para irse, Lockhart se encontró de repente boca abajo en el suelo.

"Eso... lo aprendí del autoaprendizaje... no de tu clase". aclaró Neville, mientras lograba levantarse del suelo después de enviar un encantamiento y hacer tropezar al hombre.

"Sabes... Iba a borrar tu memoria e irme, pero ahora..."

Había muchas cosas que Gilderoy podía perdonar u olvidar... pero dañar intencionalmente su orgullo y alegría, su rostro, no era una de ellas.

***HPBB***

"Ah, entonces tú debes ser Harry Potter..."

Los ojos de dicho chico miraron entre su futuro oponente y la chica que había jurado rescatar. "Entonces, tú eres el que lastimó a Hermione".

El otro estudiante varón parpadeó confundido, "Hermi... oh, ¿la sangre sucia de cabello castaño? Sí, supongo que fui yo... al menos en cierto sentido. Sin embargo, tu amigo aquí fue bastante fácil de manipular a pesar de todo, los niños siempre son. Un poco de posesión aquí y allá, agregue un niño socialmente aislado y mentalmente débil y tengo la receta perfecta para mi venganza ".

"¿Venganza contra quién?"

"¡Todos! Pero estoy divagando, si realmente quieren ver al atacante de su amiga... entonces la llamaré". Con eso, el chico hizo un extraño siseo, pero para Harry fue tan claro como en inglés, ̕ § Ven y destruye mi belleza. ¡Salid y matad, el heredero lo mandassssss! §

Un sonido alertó al chico con gafas desde atrás, cuando se dio la vuelta y vio cómo se abría una gran cara de piedra y una enorme serpiente se deslizaba por su boca.

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Una vez más, Neville fue arrojado por el baño, chocando contra las barreras que rodeaban los baños y asustando tanto a Myrtle que ella huyó.

"Te dije que este no sería un final rápido y fácil para ti, mocoso. Voy a hacerte sufrir por lo que le hiciste a mi cara".

"Le hiciste un favor al mundo si me preguntas..." Murmuró el chico, tosiendo un poco de sangre mientras luchaba por levantarse del suelo. Estaba seguro de que ya había al menos varios huesos rotos en su cuerpo, y sin duda estaba cubierto de moretones.

En ese momento, el pensamiento se abrió paso en su mente para simplemente quedarse abajo, para darse por vencido.

'¿Por qué no? Él es más poderoso que yo, más conocedor... nadie me culparía si me quedara abajo. Es mucho más fácil de hacer...'

Entonces las imágenes pasaron por su mente, imágenes de un chico de cabello negro atrapándolo en medio de una caída, historias de él levantándose una y otra vez para salvar a una niña de un monstruo vicioso, recuerdos de su sacrificio para salvarlos de una bludger rebelde y cayendo docenas de pies solo para sacudirlo.

Su mejor amigo, a quien había enviado solo para enfrentarse a un terror desconocido capaz de petrificar a los estudiantes. Había enviado a su compañero Gryffindor a salvar a una chica y detener a un maníaco... ¿qué derecho tenía a renunciar?

Con un gruñido de esfuerzo, el heredero de Longbottom se levantó e intentó levantar su varita hacia el hombre, antes de que se la arrancara de la punta de los dedos y la atrapara su oponente.

"Estrategia de duelo número uno, desarma a tu oponente. ¿Seguramente prestaste atención al menos durante esa clase?"

"Yo... sí recuerdo... que Snape... te golpeó...", exclamó el joven rubio, mientras caía hacia atrás y apenas lograba mantenerse erguido apoyándose en el alféizar de una ventana.

"Por supuesto..."

Con otro movimiento de su muñeca, el fraude envió a su antiguo alumno volando por la habitación y al suelo una vez más.

***HPBB***

Una maldita serpiente gigante. Aparentemente, ese era el monstruo que había estado acechando los pasillos de Hogwarts durante los últimos meses.

Harry observó con horror cómo la serpiente, de al menos veinte metros de largo, se deslizaba rápidamente hacia él.

§¡Mátalo! §

Harry evitó por poco las mandíbulas de la gran bestia, que prontamente lo intentó de nuevo, obligando al niño a rodar hacia delante y debajo de la boca de la bestia.

Desafortunadamente, esta vez no saldría ileso, ya que la cola se lanzó hacia adelante y lo lanzó a través de la habitación, estrellándolo contra la pared opuesta.

Sin embargo, y para gran sorpresa de Riddle, el chico se levantó como si estuviera perfectamente bien.

Una fracción de segundo más tarde, estaba atrapado contra la pared por la mandíbula del basilisco, tratando desesperadamente de contener al monstruo, por lo que su varita cayó al suelo debajo de él mientras sus manos estaban ocupadas.

El monstruo y el chico se miraron a los ojos, cada uno tratando de dominar al otro. Sin embargo, a pesar de la antigua fuerza que ejercía la criatura de Slytherin, el estudiante de segundo año se contuvo antes de mostrar una impresionante cantidad de acrobacias, saltando sobre la cabeza de la criatura y pateando hacia atrás, usando tanto su golpe como la fuerza de la propia fuerza del monstruo para embestir su cuerpo. cara a la pared, rompiendo la piedra en el proceso.

Riddle frunció el ceño, antes de dirigirse lentamente hacia la varita del chico, que había rodado hacia el lado opuesto del basilisco como su dueño.

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Un chasquido enfermizo permeó el aire cuando el cuerpo de Neville se congeló en el suelo, cada fibra de su ser estaba tratando desesperadamente de descubrir una posible razón diferente para ese sonido, pero en su corazón sabía cuál era. El chasquido de una varita, la suya más específicamente. La varita que había sido de su padre y luego pasó de generación en generación cuando no logró causar ninguna impresión en Ollivander's.

Mientras levantaba lentamente la cabeza, el estudiante rubio miró con cautela al hombre al que había estado tratando de detener.

Lockhart lo miró a los ojos con una sonrisa repugnante y levantó las dos piezas de madera, como para burlarse aún más del niño, antes de dejarlas caer lentamente al suelo.

"¿Ahora qué chico?"

En este punto, Neville realmente no tenía idea. Cierto, se había metido en esto solo con el plan de retrasar al hombre, tal vez lo suficiente como para que otro maestro interviniera, pero ahora... la realidad de la situación no solo lo había alcanzado, sino que lo había golpeado de cabeza.

Ahora no tenía magia, estaba gravemente herido y no tenía esperanza de que lo respaldaran. Necesitaba un milagro...

"¡Oye! ¡Deja de ser tan idiota!"

Lockhart se dio la vuelta y al instante disparó una maldición... que atravesó inofensivamente al fantasma, que aparentemente había regresado sin que ninguno de los combatientes se diera cuenta.

"¡Estás siendo un idiota! ¡Basta!"

"Fuera de aquí, estúpido..."

"¡ESTE ES MI BAÑO Y TU NO ERES UNA NIÑA, SALTE!"

El hombre gruñó molesto cuando su discusión con la chica muerta se intensificó, mientras que la mente de Neville giraba más rápido que la de Hermione en una biblioteca de pared a pared. Tenía que hacer algo drástico, tenía que encontrar alguna forma de...

Los ojos del heredero de Longbottom se abrieron cuando se dio cuenta de lo que estaba justo al lado, algo que Gilderoy había olvidado durante su batalla.

***HPBB***

"Es inútil Potter, no puedes derrotar a mi monstruo y pronto regresaré y la chica estará muerta. Una vez que eso suceda, tú y el resto de tus amigos se unirán a ella".

Tal como había esperado, el niño con anteojos se detuvo en su duda para procesar lo que había dicho, más que suficiente para que su serpiente se adelantara y atrapara al niño con sus fauces. Sin embargo, a pesar de sus burlas y burlas, el joven Lord Voldemort se había vuelto bastante... preocupado. De alguna manera, el niño no había muerto al cruzar la mirada con el rey de las serpientes, ni había quedado petrificado. ¿Había descubierto de alguna manera un hechizo que pudiera protegerlo? Quizás Dumbledore lo tuvo y lo usó con el niño sabiendo que eventualmente entraría en conflicto con la bestia.

Fueron puros reflejos y suerte lo que le permitió a Harry mantener abierta la boca de la serpiente, sus colmillos a escasos centímetros de su cuerpo. Sin embargo, con su boca apretada, Harry estaba perdiendo rápidamente el poco espacio que tenía para su propia seguridad, y los colmillos se hundieron lentamente en su brazo, perforando la piel e inyectándole veneno letal mientras el niño gritaba de dolor.