꒰capítulo trece꒱

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Sunoo observaba con atención las canastas decoradas que había en el mostrador

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Sunoo observaba con atención las canastas decoradas que había en el mostrador. Había entrado a una tienda de regalos llamado por una gran variedad de canastas con comida o dulces y consideró que sería un buen regalo, pero aun así no estaba seguro.

¿Siquiera se había detenido a hacerse una idea de lo que podría encontrarse? no lo había hecho con mucha determinación, y hasta entonces se dio cuenta de que sí estaba un poco nervioso. Era obvio que Jake y Sunghoon ya no eran niños, si bien aún muy jóvenes, casi adultos, habrían tenido que cambiar enormemente, Sunoo no podía imaginárselos. Recordar al pequeño Jake le causaba una alegría muy tierna, después, recordar a Sunghoon, lo alegraba también, pero lo llenaba también de intriga y curiosidad, porque quería saber cómo había utilizado su inteligencia, cómo había marchado su vida aún ante los problemas.

—¿Busca algo en particular? —Sunoo fue interrumpido de sus pensamientos por la voz de una chica que le había llamado después de haberlo estado observando un rato, allí de pie frente a los arreglos.

—Sí —miró por un segundo a la chica y luego regresó a las canastas —. Verás, estoy buscando como un regalo de reencuentro —informó, un poco inseguro de sí era lo que quería decir.

—¿Alguna ocasión en particular? —preguntó por nueva cuenta la joven. Sunoo analizó los regalos otra vez, pensando un poco en qué podía responder—, ¿de pareja, amistad, familia…?

—Amistad —contestó Sunoo aclarado, sonriendo un poco ante la amabilidad de la empleada.

—Bueno, para ese caso podría recomendarle alguna canasta con dulces y galletas, algunos globos quizá y-

—Flores —agregó, dándose una idea de todo en conjunto, si cambiaba los globos por flores resultaría un regalo más agradable a su parecer.

—Así es, si así lo desea podríamos agregar algunas flores, sólo indíqueme —Sunoo asintió, pensó en que los lirios eran muy bonitos, y además su flor favorita; por lo que sabe tienen gran cantidad de significados.

—¿Podrían ser lirios en lugar de globos?

—Así será, ¿de qué color le gustarían?

—Azules — contestó con simpleza.

Recordaba que alguna vez en su vida haber aprendió que los lirios azules conllevaban el advenimiento de buenas noticias, y la representación de un amor tierno y puro. Le parecían ideales, porque recordaba a Sunghoon como el niño que tuvo su primer amor en él, y era un hecho que ahora, además de gracioso, le seguía pareciendo tan tierno como en ese momento.

Oh, es cierto. Sunoo fue el primer amor de Sunghoon. Kim sonrió disimuladamente cuando recreó en su mente todos esos recuerdos, recordaba muy bien lo nervioso que se sintió ante aquella situación, porque bien, ¿qué clase de persona hubiese sido si hubiera aceptado tal petición? un delincuente tal vez, Park era sólo un niño.

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