Perspectiva (itasaku)

Que?

Sabía que el tiempo se estaba agotando y tenía que encontrar a Tsunade para llevar a Sakura de regreso con los guardias. Mi condición no mostraba síntomas del virus que me inyectaron, así que me centré en mi búsqueda. Después de un rato, encontré a Shizune, la asistente de Tsunade, tirada en el suelo. No era buena señal, pero seguí adelante. Finalmente, encontré a Tsunade inconsciente. Me acerqué e intenté despertarla, pero no reaccionó de inmediato. Después de un tiempo, Tsunade despertó lentamente. Le pregunté rápidamente: "¿Dónde está la niña?" Ella bajó la vista y respondió con voz temblorosa: "Se la llevaron".

Esto me inquietó. Aunque Sakura no era de mi interés personal, sabía que sus padres la esperaban y la querían mucho. Si algo le pasara por mi negligencia, no podría perdonármelo. Además, el virus que me inyectaron no sería removido si no la devolvía a salvo. Necesitaba encontrarla. Pregunté a Tsunade si sabía quién se la había llevado.

"Sí, sé quién se la llevó. Es una chica de cabello negro. No puedo darte su nombre, lo siento."

"No importa, Tsunade. Solo dime hacia dónde se fue. Es importante que la traiga de vuelta. Su padre es alguien importante."

"Creo que se dirigió hacia Konoha, pero no estoy segura. No veo lógica en ir hacia allí."

"Gracias, Tsunade. Me voy."

Me dirigí hacia Konoha. Sabía que como criminal buscado no podía entrar libremente, así que tuve que escabullirme. Una vez dentro, busqué por un buen rato hasta que vi a una niña de cabello rosa siendo llevada en caballito por una pareja mayor. Me acerqué disfrazado como un jounin y les pregunté si la niña era suya. La pareja respondió que era su hija, Rakusa, que acababa de regresar de visitar a una tía. Aparentemente, estaba cansada y dormida. Cuando les pregunté a qué clan pertenecían, dijeron que eran del clan Haruno. 

Agradecí la información y me disculpé, mencionando que la niña me parecía familiar. La mujer, nerviosa, susurró algo sobre un tal Kaito y cómo Rakusa podría parecerse a su hija. No entendí del todo, pero no era lo que estaba buscando. Antes de irme, les pregunté si conocían a Sakura Hyuga, la hija menor de Hiashi. Ellos confirmaron que la conocían, aunque no en persona, y comentaron cómo Hiashi la protegía mucho, especialmente después de la muerte de Hizashi. Decían que Hiashi cuidaba a Sakura como si fuera un último regalo de su difunta esposa.

Les agradecí y me retiré de Konoha de la misma manera en que entré. La situación era crítica. Si no encontraba a Sakura, el virus seguiría propagándose en mi cuerpo, y no podía permitir que eso sucediera. Sasuke necesitaba tener la oportunidad de vengar al clan Uchiha, y yo no podía morir antes de asegurarme de que él tuviera esa oportunidad. 

De vuelta en la guarida de Akatsuki, me encontré con Pain. Me preguntó qué estaba haciendo, y aunque sabía que no debía darle explicaciones, respondí de todos modos, subrayando que era un asunto personal que no concernía a Akatsuki ni al mundo ninja. Pain, como líder, insistió en que todo lo que hacíamos era de su incumbencia, para poder confiar en nosotros.

Le respondí que, aunque era importante que un líder tuviera la confianza de sus subordinados, también era crucial que ese líder compartiera algo de sí mismo. Solo así podría entender la igualdad y desigualdad del mundo de manera más profunda. Pain guardó silencio, pero justo cuando pasaba a su lado, dijo algo que me hizo detenerme abruptamente.

"Dime, Itachi, alguien que nació como un prodigio, que nunca tuvo que esforzarse por nada, ¿tiene el derecho de hablar de liderazgo con alguien que siempre se esforzó por tomar el camino correcto? ¿Cuántas veces te esforzaste tanto hasta sangrar para conseguir algo? Nunca, ¿cierto? Todo siempre te fue fácil..."

Hmp—decidí no responder. No importaba lo que pensara de mí; no era relevante. Su opinión era irritante, pero soportable. No conocía mi historia, solo hablaba por hablar. Mientras me alejaba, reflexioné sobre cómo mi camino estaba lleno de sacrificios y decisiones difíciles, y cómo pocos realmente comprendían el peso de esas decisiones.