Pt.1

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Felix tenía una vida perfecta junto a su esposo Hyunjin y sus dos hijos pero un día simplemente todo se esfumó...

Viernes por la noche, Felix trabajaba en su computadora, escribía con rapidez, sus ojos casi cerrándose por el cansancio.
El reloj apuntaba las 11:56 pm cuando la lluvia comenzó junto con algunos truenos.

-Cariño, deberías descansar, es tarde y no es bueno utilizar aparatos eléctricos durante una tormenta- Comentó Hyunjin cuando abrió la puerta de la habitación y visualizó al castaño frente al escritorio.

-Amor...necesito terminar la nota para el lunes, si no lo hago el jefe se enfadara.

-Que se joda Jisung, vamos a dormir, esta noche yo te cuido. Mañana yo hago toda la limpieza y me encargó de los niños para que puedas terminar, ¿Si?

Felix sonrió y se levantó de la silla para abrazar al rubio.
Aún abrazados se dirigieron a la cama, Hyunjin se encargó de arropar y mimar al menor antes de caer en los brazos de Morfeo.

Al llegar la madrugada todo parecía tranquilo, pero aquella paz se terminó cuando se escuchó un estruendo proveniente de la cocina.

Dicho ruido despertó a Felix, lo primero que hizo fue ver a su lado, Hyunjin ya estaba despierto, se mantenía alerta parado al lado de la cama. El sonido de la lluvia paso de ser pacífico a espeluznante tomando en cuenta la situación.

-¿Jinnie?¿Qué sucede?- Preguntó suavemente

-Algo anda, quédate aquí, iré a ver.

-No, voy por mis hijos.

Con determinación se levantó de la cama y caminó hacia la puerta.

-Lix, vamos juntos, no salgas solo.

El menor asintió, tomó la mano de su esposo y salieron de la habitación.

El sonido de algo de vidrio rompiéndose los hizo sobresaltar, Hyunjin podía sentir como la mano de su amado temblaba, así que con la propia acarició suavemente el torso de la contraria.
Claramente está demasiado asustado, incluso más que Felix pero debía ser fuerte por su familia.

Cruzaron el pasillo hasta llegar a la habitación de sus pequeños, los cuales ya estaban despiertos.

-Felix quédate aquí, voy a ver qué sucede.- Le dijo Hyunjin.

El mencionado solo lo miró suplicante, no quería dejar a sus hijos solos pero tampoco que su esposo vaya.

El más alto tomó un bate de béisbol y salió de la habitación con sigilo, bajó suavemente las escaleras, admirando alerta el panorama.

Los cristales de las ventanas estaban rotos y esparcidos por el lindo tapiz de la sala.
Cuando terminó de bajar miró a ambos lados, no había indicios de lo que provocó el ruido.

Sintió que el corazón se le subió a la garganta cuando observó el exterior por la ventana rota.
Había una camioneta negra con cristales polarizados, retrocedió impactado sin saber exactamente qué hacer.

¿Qué mierda estaba sucediendo?

Iba a subir nuevamente las escaleras pero cuando se dió la vuelta un tipo bastante alto y musculoso lo tomó del cuello con sus fuertes manos, logrando elevarlo unos centímetros del piso. Ni siquiera le dio tiempo de defenderse.

-A-agh s-sueltame

En un intento de escapar, lanzaba patadas, finalmente logrando golpear al tipo en el estómago, lo cual fue suficiente para que lo soltara mientras se retorcía de dolor.
Cayó al suelo cuando fue liberado pero rápidamente se levantó y corrió a las escaleras.

El tipo alto aún seguía aturdido, pero sin perderle pista al rubio lo siguió.

El tipo alto aún seguía aturdido, pero sin perderle pista al rubio lo siguió

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Felix al escuchar pasos apresurados, se puso en alerta.

-Yeonjun, Soobin, ocultense en el clóset y no salgan a menos que papá Jinnie o yo les diga ¿De acuerdo?

Ambos niños obedecieron a su padre y se metieron en el lugar señalado, un clóset de pared que era lo suficientemente espacioso para ellos.
Felix tomó unas tijeras que estaban en el escritorio, con pasos cautelosos se acercó a la puerta, la abrió suavemente y observó.

De pronto un tipo pelinegro se le apareció enfrente, traía una cámara en la mano derecha. Retrocedió e inevitablemente se vio acorralado por el sujeto.

-El lindo y sofisticado Lee Felix temblando de miedo a las 2 am, algo digno de apreciar. Siempre quise conocerte pero me fue imposible por tus estrictos horarios, mi lindo reportero.- Dijo acariciando la mejilla del más bajo y luego le quitó las tijeras tirandolas al suelo.

Al instante Felix intentó alejarse pero chocó con la cama y cayó en esta.

-Al parecer alguien quiere sentir algo rico, no te preocupes mi vida, a eso venimos-Dijo con burla mientras ataba sus manos al respaldo de la cama.

-¡N-no, alejate p-por favor!

Un ruido desde el interior del clóset hizo que se alertara, el tipo caminó hacia allí, grabando en todo momento. Felix sentía un nudo en la garganta, quería llorar y gritar, no entendía porque le sucedía a él, aunque hubiera preferido que su familia no estuviera involucrada.

El delincuente abrió la puerta de madera y descubrió a los dos niños, quienes se abrazaban entre ellos con lágrimas en sus ojos.

-Mira que tenemos aquí...¡Los hijos del matrimonio Hwang!

-¡P-por favor no les hagas daño! Es a mi por quién has venido, d-dejalos en paz- Suplicó Lee llorando

Justo en ese momento otro tipo, aún más alto, entró mientras mantenía a Hyunjin inmóvil con sus manos en la espalda, estaba lleno de golpes en el rostro.

-¡Felix! ¡Suéltame imbécil!- Gritaba mientras intentaba soltarse

-¡Menudo idiota, no aprendes la lección!- Jaló el largo cabello de Hwang hacia atrás, ocasionando un jadeo de dolor.

- Que bueno que toda la familia está reunida, así serán testigos del final de esta perfecta farsa. Alex, amarra al rubio a una silla y luego encierra a los niños nuevamente en el clóset, solo Hwang tendrá la dicha de ver cómo disfruto a su lindo marido.

-¡N-no se te ocurra tocarle ni un solo cabello a Felix! ¡Te mataré idiota!

-Te enseñaré que nadie se mete con el gran Kevin.



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