Treinta y dos años.

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Treinta y dos años. 

Estaba sentado en una silla que conformaba la sala de espera. Inhale y exhale. Mire mi celular que había vibrado minutos antes. 

"Papá ¿estás allá?" 

Suspire. 

"Si, Chris. ¿Estas en la casa de Jake? 

Si, estoy con Dominik. 

Cuando salga de aquí te recogeré. 

Muy bien, te quiero papá:) 

Y yo a ti." 

Habían pasado ocho años desde la partida de Louis. No sé como narrar lo que paso después de esa noche y me duele recordarlo. Ese día les dije a los señores que se lo llevaron a el hospital que lo trasladaran a Londres, porque ahí lo iba a enterrar. Llegue del hospital y no sabia que hacer. Así que solo empaque nuestra ropa en sus respectivas maletas y empaque también la de Christian, que dormía tranquilamente. 

Yo estaba un completo desastre, mi garganta dolía y mis ojos ardían, aún así empaque todo y levante a Christian. 

- ¿y Louis?.-preguntó rascándose los ojos soñoliento- 

- Solo quiero que duermas conmigo, Chris.-susurre apunto de volver a llorar- 

- ¿tienes miedo, papá? 

Asentí. Tenia miedo no poder llevar esto con madurez, porque no estaba Louis y no habia desaparecido, se había ido, del todo y ya no sabia como podía seguir con mi vida. 

- Me dijiste que los monstruos no existen.-dijo frunciendo el ceño- 

Pero la muerte sí, pensé. 

- Solo duerme conmigo y ya. 

Christian asintió y lo tome en brazos para irnos a acostar en la cama que nos correspondía a Louis y a mi. Christian se durmió sin problema pero con respecto a mi, no pude pegar el ojo en toda la noche, me la pase llorando y murmurando cosas a la nada. Sí, a la nada porque Louis ya no estaba. 

Volver a casa fue lo mas complicado. Habían pasado un día completo sin Louis y Christian comenzó a preguntarme donde estaba, pero yo no estaba listo para decírselo. Mejor, no estaba listo para aceptarlo. 

-Su entierro será en cuatro días, Harry.-dijo mi madre por teléfono- 

- Bien. 

- ¿Cuando vendrás? 

- Esta noche sale el vuelo, estaré ahí mañana en la mañana. 

- Bien, hijo. 

Silencio. 

- ¿quieres hablar?.-preguntó preocupada- 

- No. 

- Harry, sabes que puedes contar conmigo en lo que sea. Eres mi hijo y se que quieres hablar de esto con alguien, no puedes estar sufriendo en silencio. 

- No quiero hablar sobre todo esto. 

Escuche su suspiro en la linea. 

- ¿Ya se lo dijiste? 

- ¿qué?

- A Christian. ¿se lo dijiste?

- No. 

- ¿cuando piensas decírselo? 

- Hoy. 

- Muy bien, te esperamos. 

No cierres la ventana. (Larry Stylison.) OS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora