•One Shot's | Johnlock•

aquel chico bonito

John estaba perdidamente enamorado.

Sus nervios salían al instante cuando se topaba con aquel chico de cabello rizado. Sentía cosquillas en su pecho cuando aquel chico bonito se acercaba a hablarle. Una simple sonrisa de aquel chico hacía que su día se ilumine. Un apenas roce de manos hacía que sus mejillas ardieran.

John estaba perdidamente enamorado de aquel chico alto, pálido, ojos malditamente hermosos, cabello rizado oscuro y con sus manos jodidamente perfectas.

Estaba perdidamente enamorado de Sherlock Holmes. Todo él.

¿Cómo no estarlo? Si Sherlock era perfecto.

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Una tarde como cualquier otra, John estaba yendo hasta su habitación. Estaba cansado de tanto estudio, apenas iban a mitad de año y los profesores los tapaban de tarea. Cuando llegó, agarró la llave, pero la puerta estaba entre abierta. Unió sus cejas, confundido. Entró a la habitación y se adentró hasta la parte donde dormía, ya que en la sala no había nadie. Cuando llegó, casi se muere ahí mismo.

Aquel chico, del cual estaba enamorado, se encontraba en su habitación. Traía una camisa blanca que cabe destacar, le quedaba perfecto. Estaba leyendo un libro, el cual, cuando John reaccionó, se dio cuenta que era su libro para anotar las cosas que se le vienen a la mente.

Le arrebató el libro de las manos y Sherlock lo miró.

-Oh, no te había visto.

-¿Cómo entraste?

-No lo sé.

John unió sus cejas.

-Leí ese libro. Escribes muy bien, Jawn. Y me sentí alagado por la forma en como detallas cada cosa de mí y dices lo bonito que soy.- sonrió.

John quería que lo tragara la tierra en ese mismo instante.

-No te preocupes, yo hago lo mismo. No escribo de mí, pero si de tí.- volvió a sonreír.

John estaba sorprendido y sin saber que decir.

-Bueno, me tengo que ir. Por cierto, eres muy lindo.- se dirigió a la puerta y antes de irse, dijo algo más.- un gusto, John.

Y se fue.

Aquel chico era tan raro y misterioso a la vez.

Y eso a John le gustaba.