Estamos muertos

CAPITULO 1

Salía de mi casa mientras escuchaba como mi madre me gritaba desde el comedor recalcandome una vez más que era una inútil por estar como siempre en segundo lugar de la clase, cansada de todo eso decidí que hoy haria un pequeño desvio en mi camino. Me dirigí a una calle un poco sola y descuidada por sus avitantes, sabiendo ya el camino me dirigí a una casa de dos pisos color roja con sus vidrios totalmente negros, toque la puerta de madera color negra a los 3 minutos salió un chico alto, flaco, pálido y con ojeras llevaba un cigarrillo en la boca.

-Asteria cuanto tiempo sin verte--mencionó con dificultad por el cigarrillo que llevaba en la boca-

-Hey que tal escucha estoy algo apresurada solo dame lo de siempre si?-mencione un poco apresurada-

-Lo que la clienta ordene--dijo mientras esperaba a que fuera por lo que pedí cuando llegó venía con una mini bolsa y una sustancia verde--toma me lo pagas luego-

-Gracias, te lo pago mañana--grite mientras me alejaba de esa casa-

Estando en mi camino para mi escuela aproveche para sacar mi pipa y colocar la marihuana dentro del pequeño agujero y con mi ensendedor deje la llama del fuego en la marihuana mientras inalaba el humo que salía del pequeño tuvo que tenia después de unas 3 jaladas pude sentirme mejor sentía como todos mis músculos se relagaban, satisfecha con el resultado guarde mi pipa en mi mochila al momento de cerrar mi mochila me di cuenta de que ya era un poco tarde así que comencé a correr no podía manchar mi nombre con un retardo.
Después de haber corrido llegue a tiempo y como siempre sin ningún retardo ya con más tranquilidad me dirijia a mi salón hasta que escuche como alguien gritaba mi nombre.

-Hey Asteria--era el idiota de Gwi-Nam, voltie y vi como se acercaba a mi estando ya muy juntos-

-Que es lo que quieres--respondí con una tanto de odio en mi voz-

-Preciosa ¿Que acaso no te enseñaron a ser más educada?--menciono mientras alzaba mi mentón para verlo a la cara, con un poco de fuerza quite su mano tratando de no llamar la atención el al notar la brusquedad con lo que hice me tomo del brazo haciendo que me doliera-

-Déjame imbecil, me estas lastimando y estas llamando la atención de todos--dije mientras trataba de quitarme su mano de encima-

-¿Si?, no estaría así si me hubieras contestado bien maldita perra--solo sentía que hacía más presión y eso hacía que me doliera aun más-

-Solo dime que es lo que quier--no pude terminar de hablar ya que alguien me interrumpió y para mi suerte era Soo-hyeok-

-¿Interrumpo algo?--tomo la mano de Gwi-Nam y la quito de mi brazo el último solo se le quedó viendo a Soo-hyeok de manera muy fea

-No nada, tu y yo tenemos que hablar que no se te olvide eh--

-Gracias--solté un poco apenada apesar de que Soo-hyeok y yo fuéramos mejores amigos-

-Ven vamos al salón-

Caminamos los dos juntos hasta el salón en el momento que entramos nos separamos el se fue con sus amigos y yo me fui con Na Yeon me senté como de costumbre a su lado.

-Fuiste otra vez ¿Verdad?--pensaba mentirle y decirle que no sabía de qué hablaba pero era inútil ella de conocía como la palma de su mano y yo solo mencione un pequeño "Si" casi como un susurro

-No se que hacer contigo--Se quedo en eso por que entro la maestra de español y pidió que entregaremos los celulares.

Después de eso la clase transcurrió normal hasta que entró Hyeon-ju manchada de sangre.