Overwhelmed || Claire's Diary

Mi primer amor.

4/03/20

"Ser profundamente amado te da fuerzas, mientras que amar profundamente a alguien te da coraje." Lao Tse.

El coraje, es una cualidad humana, definida como la fuerza de voluntad que puede desarrollar una persona para superar ciertos impedimentos, sin miedo al fracaso.

• ──────────── •• ──────────── •• ──────────── •

Aquel miércoles 4 de marzo, fue cuando te vi por primera vez y fue cuando tuve coraje para acercarme y entablar una conversación contigo. Recuerdo que fue el día más feliz de mi vida, y sé que fue el día más feliz de mi vida porque nunca antes me sentí tan feliz como cuando te conocí. Desde ese día con solo mirarte, supe no había vuelta atrás, sabía desde el primer instante que sentencié mi condena, sería prisionera de aquellos ojos color chocolate, que amenazaba a muerte a cualquiera que los mirara, esa sonrisa cautivadora y aquella voz tan melodiosa para mis oídos.

Supe que caí enamorada completamente. Sabía que era amor, porque nunca antes en mis relaciones pasadas -o mejor dicho, decepciones amorosas- nunca sentí algo parecido a eso, nunca fue tan fuerte ni tan frágil.

No soy una persona a la cual le guste mucho las muestras de afecto, pero contigo si estaría dispuesta a hacer cosas que nunca hice.

Con el transcurso de los días, no dejaba de pensar en ti. Tenía la suerte de tenerte cerca de mí, ya que estábamos en el colegio tenía las mil oportunidades de sentarme a hablar contigo, pero la mayoría de las veces no salías de tu sala de clase, siempre pasabas solo, sumergido en tus pensamientos. Tampoco quería acercarme y que creyeras que era tan insistente, que me moría por hablar contigo, cuando claramente era eso lo que sucedía. Moría por volver a ver esos ojos de cerca, moría por volver a escuchar tu voz, moría por estar contigo aunque sea unos cuantos minutos.

A tu lado, cada segundo, cada minuto, era como una bendición. Lleno de alegría, haciéndome sentir diferente, y cuando me mirabas me hacías sentir como si fuera la única persona en la faz de la tierra.

Pero toda alegría se desvaneció cuando nos aislaron, gracias a un virus mortal, el cual se propagaba cada vez más rápido. La última vez que nos vimos, algo me decía que tenía que volver a hablarte y eso hice, a veces recuerdo ese momento y me da mucha gracia.

Recuerdo que estabas por irte, y tuve que escaparme de mi sala de clase mientras el profesor de Educación Financiera, dormía en el escritorio, no desaproveché esa oportunidad tan grande. Me acerqué a hablarte para pedirte tu número y así poder conversar mejor , me habías dicho que no tenías celular pero de igual modo insistí, porque estaba dispuesta a esperarte el tiempo que sea necesario para hablar contigo hasta que tuvieras otro nuevo.

Esa misma tarde, del 11 de marzo de 2020, nos aislaron a todos. Solo serían dos semanas sin ir a clases, pero esas dos semanas se volvieron en dos años.