Pensé que eras oro.
Pero mientras más me iba acercando me iba dando cuenta que sólo eras una luz extremadamente brillante.
Y cuando estuve lo suficientemente cerca, completamente ciega y a tu merced dejaste de darme luz y miraste para otro lado.
Dejándome ciega en esta oscuridad que lleva el nombre de tu ausencia.
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Honey
PoetryY aquí estoy de nuevo, porque tuve la valentía de entregar mi corazón pero no fue recibido con el mismo amor que lo dí, y se rompió, de nuevo...