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Despues de recorrer todo Yokohama en busca del helado para su pareja, pudo regresar a su casa. Faltaba poco para que el sol empezará a mostrarse y estaba agotado.

Entro rápidamente y se dirigió a la cocina, sirviendo el helado en un baso y guardando lo que quedaba en la nevera.

-Dazaii~ - llamo su nombre dulcemente, pero no obtuvo respuesta. Se dirigió a la habitación y lo encontró dormido abrazando algunas de sus camisas, era una escena bastante adorable. Con temor a despertarlo quito las prendas de sus manos lentamente, acomodó la cobija para que lo cubriera correctamente y dejando un beso en su mejilla se retiro de la habitación.

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Al día siguiente unos gritos lo despertaron, corrió rápidamente a ver de que se trataba.

- ¿Qué sucedió Dazai? - pregunto bastante asustado.

- La ropa no me queda - dijo con lagrimas en los ojos.

- Es normal, Cariño~ simplemente estas gordito, pero cuando todo esto pase, podrás usar tu ropa -

Dazai no respondió y por un momento Fyodor pensó que todo estaba solucionado, que equivocado estaba.

- ... que estoy gordo... estoy gordo y es TÚ CULPA!!-

El castaño estaba bastante molesto y el ruso sabía que se venía una discusión bastante larga donde su pareja terminaría ganando, eso era lo que tenía en mente, hasta que Dazai se quejo de que le dolía su abdomen.

Rápidamente lo recostó en el sofá y llevo un vaso con agua, estaba asustado y no sabía que le estaba pasando a su pareja. Llamó a una ambulancia y preparo todo para salir. No paraba de pensar en la causa de que el castaño estuviera así, por un momento pensó que era culpa de su temperamento, pero descartó la idea.

La ambulancia no tardo en llegar y rápidamente lo acomodaron para llevárselo. Varias horas habían pasado desde que se llevaron a Dazai a urgencias, Fyodor caminaba de un lado a otro mientras se mordía las uñas, estaba asustado de que algo le sucediera a su amado y su hijo o hija, estaba frustrado por no poder hacer nada y sentía que se volvería loco.

Un médico salió y con un tono serio hablo -Su pareja está fuera de peligro, pero... - guardo silencio y prosiguió - Su cuerpo es muy débil, lo que le ocurrió hoy... volverá a pasar -

- ... - Fyodor gustado silencio mientras procesaba toda la información que le había brindado el médico, mentiría si decía que en esos precisos momentos no deseaba llorar.

-  El señor Dazai, se debe quedar en el hospital hasta el día del parto - continuo el médico.

- Esta bien, pero ¿Puedo verlo? -

- Por supuesto - el médico guio a Fyodor a la habitación donde se encontraba su pareja, al entrar lo pudo ver acostado en la camilla inconsciente, tomó una silla y la puso al lado de la camilla para poder sentarse y estar cerca de él.

- Lo siento - susurro, mientras tomaba su mano para dejar un beso - Debí cuidarte más... es mi culpa -

 es mi culpa -

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Hola, después de mucho he vuelto, espero que les guste y disculpen los errores de ortografía y lo corto que es el cap. Sin más que decir.

Adiós ~

DueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora