El manuscrito | MiraBruno +18 One-Shot

Manuscrito

@AlecentenoB  @Michellships @follabruno69 Son los culpables de que haya hecho esta madre, yo era un ser de Dios hasta que me convencieron de hacer esto, si me banean la cuenta es culpa de ellos!

La idea en sí no me pertenece, la vi en twitter y me gustó.

Ahora si, advertencia de contenido solo para puercos con DNI

...

"...Sus tetas rebotaban con cada movimiento, su piel canela obtenía un ligero brillo por el sudor que producía su cuerpo y eso solo lo excitaba más. Ella era como una diosa encima suya, cabalgándolo como una gloriosa reina que lo llevaba al propio paraíso con esos lascivos gestos y su húmeda entrada..."

Mirabel no lo podía creer, a pesar del frio de la noche se encontraba con la cara roja y el cuerpo caliente con solo leer aquellas palabras, porque a pesar de ya tener edad para casarse seguía siendo en sus adentros una completa niña cuando de esos temas se trataban.

Sin embargo, lo que realmente le resultaba bochornoso era que aquello que leía lo había hecho la persona que menos esperaba, su tío Bruno, quien últimamente había estado ensimismado, con una pluma entre sus manos y la cabeza metida en ese pequeño cuadernillo, escribiendo día y noche en aquel cuaderno que cuidaba celosamente.

Y que ahora ella estaba leyendo.

Sabía que él había dejado claro que no quería que nadie leyera aquella historia hasta ser finalizada, es por ello que cuando vio solitario el objeto sin la protección de Bruno se sintió mal al empezar a ojearlo, pero en cuanto las primeras palabras que ya denotaban ese tono explicito y prohibido no pudo parar de leer.

Las horas pasaban y la vela a su lado empezaba a terminarse, pero ella simplemente no podía parar, era como sin saberlo hubiera estado hambrienta de tal obsceno contenido y ahora que lo tenía en sus manos lo sentía como una necesidad de consumir. Cada palabra deleitaba su mente y le generaba un cosquilleo entre las piernas, invitándola a subir su falda y tocar por encima de sus enaguas las cuales, en ese preciso momento, odiaba con toda su alma.

Finalmente, la vela se acabó, dejándola a oscuras, maldijo por lo bajo por no poder seguir con su lectura la cual le había resultado electrizante, pero al menos así pudo pensar más en frio sobre que lo mejor era dejarlo ahí por su propio bien. Estaba lista para irse a la cama, sintiéndose picara al pensar que podría pasar desapercibida sin que nadie la hubiera visto ultrajando la privacidad de su tío.

Ya que pensaba en él y su interesante escrito, Mirabel pensó en que las palabras del cuaderno no encajaban con la visión que tenia de su querido tío, quien a pesar de ser un poco extraño le resultaba el ser más dulce y tímido que había conocido, ¿cómo sabia él tanto sobre ese tema? ¿había tenido alguna vez una relación así sin la necesidad de un matrimonio como le habían dicho sus padres? Le resultaba chocante pensar en ello, en como aquel hombre posiblemente tenga experiencia sin haberse casado, lo que significaba que tal vez, solo tal vez, tener ese tipo de contacto tan intimo fuera de un lazo sagrado no estaba tan mal como ella pensaba.

Antes de poder continuar con ese hilo de pensamientos los pasos de alguien la asustaron, haciendo que se escondiera debajo de la mesa donde había leído. Ya había vela que alumbrara el manto de la noche, pero, aun así, pudo reconocer perfectamente quien era la persona que había entrado.

—Oh gracias a Dios está aquí, pensé que lo había perdido—Dijo el hombre con alivio tomando el objeto en sus manos—no sé qué haría si alguien lo descubriera—Concluyó la charla consigo mismo para luego seguir su camino.

Mirabel salió de su escondite y tuvo curiosidad de saber si por la hora, su tío se había levantado en un golpe de inspiración, porque si era así, le encantaría verlo de primera mano. Es así como con cautela subió las escaleras y se escabulló al cuarto de Bruno, donde sabía que ni Dolores ni el propio dueño del cuarto sabrían que ella estuvo ahí ya que el sonido de la arena impedía cualquier ruido limpio.