IGNOTO

La Incógnita Del Amor

Se dice que todos estamos destinados a tener nuestra gran esperada alma gemela, el amor de nuestra vida, una persona que nos complementa, alguien que llega para quedarse... ¿Es acaso quien nos hace sentar cabeza?
Se dice que ese gran amor llega después de pagar unas cuantas deudas con nuestros amores karmicos, esos amores que sólo vienen a enseñarnos pero que tanto nos empeñamos en confundir con nuestro gran amor, esos amores donde amar duele tanto como dejarlo ir... ¿Son estos amores los que nos enseñan el verdadero significado de amar a alguien?
También se dice que existe otro último amor, uno más difícil de encontrar pero sobre todo uno más difícil de conservar, nuestra llama gemela, este amor del que pocos gozan pues para lograr llegar a él es necesario saber tu valor, tu llama gemela no es alguien que te complementa, es mas que eso, es la persona que llega cuando eres capaz de reconocer que ya estás completo, que estás listos para compartir tu vida a lado de alguien, un amor tan poderoso del cual no todos están listos, es aquí la diferencia de estos tres amores, los amores karmicos son amores fugaces, amores que hieren, amores que vienen a enseñarnos el valor del soltar cuando sea necesario; las almas gemelas llegan a nosotros para enseñarnos el arte del amor, un amor que te genera en hermoso sentimiento de querer volver a tu hogar todos los días; por otra parte las llamas gemelas se distinguen por una única cosa, tu eres tu hogar, este amor requiere que ambos conozcan el verdadero significado del amor propio, que reconozcan que son uno sin el otro pero que deciden compartir su vida por esa magia que los une, es por eso que este amor no es para todos, muchos nos han entendido el verdadero significado del amor, de compartir tu vida con alguien, de dejar de esperar a tu otra mitad...
¿Pero que pasa con la llama gemela cuando uno de los dos ha decidido quedarse con su alma gemela?