Un impacto desconocido

Capítulo 20 (modificado)

Este capítulo tiene un cambio importante con respecto al original.

Disfrutar :)

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Nunca pensé que vería el día en que me encontraría corriendo directamente hacia una tormenta de disparos con solo una espada en la mano.

Una escena tan extraña e imposible que solo se vería en un anime.

Sin embargo, aquí estaba yo haciendo exactamente eso.

Reprimí el impulso de tratar de esquivar la lluvia de balas, cada instinto en mi cuerpo me gritaba que saltara fuera del camino.

Sin embargo, no sentí miedo cuando un escudo verde luminoso se manifestó ante mí, el guantelete en mi mano fue el responsable de ello. Fue extraño tratar de describir cómo pude incluso activar el escudo en primer lugar. Tal vez si apretara mi mano de cierta manera o podría detectar proyectiles entrantes...

Pero podría decir con certeza que después de la primera vez que lo había usado.

Naturalmente vino a mí como lo hizo la respiración.

La lluvia de balas rebotó inofensivamente en el escudo verde hexagonal, los cartuchos de metal rotos esparcieron por el suelo mientras mi escudo se mantenía firme contra el torrente de acero caliente. Brillaba tan brillante como había aparecido por primera vez cuando los soldados se quedaron sin munición para desperdiciarla contra su inquebrantable defensa.

"¡Ahora!" Grité cuando Midori saltó sobre mí, con una mano en su espada mientras se elevaba por encima de los soldados. Se movieron para intentar disparar a la Valkyrie en el aire con sus pistolas secundarias, con la esperanza de que una bala de la suerte la derribara.

Midori susurró algo entre dientes mientras su mano desenvainaba su katana en un rápido movimiento. El sonido de una cuchilla cortando el aire fue todo lo que se escuchó antes de que Midori aterrizara con gracia detrás de los soldados.

Echó un último vistazo a los soldados antes de envainar su katana.

Y con ella cada soldado cayendo al suelo como una pila de fichas de dominó.

Al ver a los soldados caer con una facilidad tan aterradora, no quería nada más que desviar la mirada de lo que vendría después. La sangre que sin duda fluiría como un río del único golpe de Midori, pintando el suelo del almacén con sus tonos escarlata.

Pero, por desgracia, no pude tener ese único consuelo ya que estábamos en medio de una batalla agotadora. Incluso ahora podía escuchar a los soldados que se dirigían hacia nosotros desde todas las direcciones, sin duda con la intención de rodearnos con su número muy superior.

Así que lancé una mirada de disculpa a los cuerpos de los soldados caídos antes de correr a través de sus cuerpos ensangrentados, siguiendo el ejemplo de Midori mientras ya se dirigía hacia el grupo de soldados más cercano.

Era un plan bastante simple, Midori simplemente se concentraría en reducir el número de enemigos lo más rápido que pudiera y yo la seguiría para actuar como su escudo, pero también para eliminar a los rezagados que se le escaparon.

Fue surrealista ver a la verdadera Midori Aki en acción. Siempre fue reservada en la Academia Chiba, diciendo muy poco a menos que sus compañeros o un maestro le pidieran que hiciera lo contrario. Aparte de Mei, no creo haberla visto interactuar con nadie más aparte de sus compañeros de club de kendo.

En retrospectiva, ella era la misma en la batalla, todavía no la había escuchado decir una sola palabra desde que desenvainó su espada por primera vez.