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Yoongi presionó su cabeza contra el volante. Gran día para haber tráfico.
Tenía que conseguirle a su omega sus galletas favoritas que se encontraban en la tienda más lejana de su casa junto a crema de batir y un batido de mora.
Entendía que su omega no lo hacía por querer fastidiarle la vida, simplemente era uno de sus muchos antojos de embarazado.
Y Yoongi como buen alfa se encargaba de darle todo lo que podía.
Suspiró cuando por fin el tráfico se movió y pudo continuar con su camino.
Estando en la repostería recibió un mensaje más de su novio.
Minnie❤️:
También quiero papas fritas. 4:57p.m
Peinó su cabello hacia atrás buscando aliviar el malestar que empezaba a formarse en su cabeza, pero luego pensó en que todo lo que hacía tenía una buena justificación.
Dejó los malos pensamientos y angustias atrás y compró todo lo que su omega le había pedido haciendo algunas compras de más por si más tarde al omega se le antojaba otra cosa.
Tomó las bolsas con comida y las dejó en el baúl del carro. Posteriormente se subió en este y comenzó a conducir de vuelta a casa.
Mientras conducía sus ojos se posaron en una gran fábrica de juguetes.
Seguramente si le compró un peluche a Jimin estará encantado, pensó.
Parqueo el auto y se adentró en el gran establecimiento viendo la cantidad exagerada de peluches.
Habían de todos los tamaños y formas.
Miró por un largo rato buscando el peluche perfecto y cuando lo encontró lo pagó sin problemas.
Se trataba de un pollito de tamaño mediano, su textura era suave y blanda.
Lo puso en el asiento de atrás y ahora sí emprendió rumbo a su casa.
Cuando llegó, la casa estaba en absoluto silencio.
Dejó el peluche encima del sofá y se adentró en la cocina para prepararle algún postre con los ingredientes que había pedido Jimin.
Optó por hacerle un pequeño pastel de galletas, con crema de batir encima y el batido como bebida junto a las papas fritas en su propia cajita.
Subió la comida y el peluche a la habitación y pudo ver a su omega completamente dormido, tenía la frente sudada y se podía notar que tenía rastros de lágrimas en sus mejillas.
Yoongi se angustió, ¿Qué podría haberle pasado a su bebé?
-Minnie amor, ya volví- lo despertó con dulzura y seguidamente Jimin abrió los ojos.
En cuanto lo hizo se aferró al cuello de su alfa sollozando.
-No vuelvas a irte así- dijo en medio de llanto, empapando la camisa de Yoongi.
-Solo estaba comprando tu comida cielito, ¿pensaste que te iba a abandonar?- el menor asintió sonrojado limpiando sus lágrimas -Jamás lo haría bebé, te amo mucho y a nuestro cachorro- dicho esto le extendió el plato con el pastel y Jimin relamió sus labios contento tomándolo y devorándolo como si no hubiera un mañana.
No dijo una sola palabra pero por su expresión Yoongi dedujo que estaba delicioso.
-Gracias Yoonie, en verdad no te merezco- empezó a llorar nuevamente el Omega.
Yoongi tomó el plato ya vacío y lo dejo a un lado alzando a su omega como un bebé y esparció besitos por su rostro.
-No digas eso amor, claro que sí me mereces, eres todo para mí- lo arrulló y lleno de palabras bonitas hasta que el omega volvió a sonreír.
Definitivamente un embarazo traía muchos cambios, pero que feliz lo hacía tener tan consentido a su hermoso chico.
🐱🐥
<3.
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