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Hermione Granger caminaba hacia la Torre de Astronomía, lugar donde sería el punto de encuentro con su supuesto admirador.  Estaba nerviosa, y pensó en cómo reaccionaría al saber quién era.

Llegó al lugar, observando profundamente cada lugar, como temiendo que la persona se ocultara. Frunció su ceño al notar que no había nadie, pero si una nota. 

La tomó en sus manos y leyó:

Querida Castaña: 

¿De verdad creíste que sería tan fácil? Lo siento, pero, ¿qué te parece un juego? Yo dejé pistas en distintos lugares del castillo, tú debes encontrarlas y así me verás. 

PD: ¿Mencioné qué adoro el Quidditch?

(Nota de autora: Soy cruel, pero me gusta serlo, jajajaj. Chan, nada es fácil en la vida :/)

Querida Castaña...»Hermione Granger.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora