Desear y Realidad

888 108 25
                                    


N.A. Para fines de este fic, la guerra de Marineford y el regreso de los Mugiwaras a Sabaody fue en fechas cerca de Navidad. 

Luffy había estado triste y sólo, había pensado mucho mientras entrenaba y decidió que pediría un deseo más a Santa cuando se reencontrará con sus nakamas, uno que ya había pedido antes y que había funcionado.

Llegó con sus amigos, estaban todos frente a él y ahora bajaban a las profundidades del océano. Era increíble, todo bellísimo y al escuchar a Sanji decir que prepararía la cena para Navidad y a Chopper exclamar sobre hacer su carta, Luffy recordó. ¡Su deseo!

Al igual que hace unos años Luffy fue a la recamara de niños, tomó hojas y crayones y salió al césped para redactar su deseo. Una parte de él tenía miedo de que Santa se había olvidado de él porque el mismo Luffy lo estaba ignorando.

Luffy, tu eres muy bueno entonces no debes preocuparte de que Santa no te de regalo, él siempre te va a dar porque tu eres un buen niño, el mejor de todos.

Luffy no creía que fuera el mejor de todos los niños, pero Makino siempre decía la verdad, entonces esperaba que no se equivocara en esto porque Luffy necesitaba este deseo.

-¿Qué tienes ahí Luffy-bro?- preguntó Franky mientras le pasaba otro crayón a Chopper.

-Mi carta a Santa, hace mucho que no le pedía algo pero este es un deseo especial.

-¿Y qué le vas a pedir?

-Una puerta. 


 ***


Franky, Robin, Zoro, Sanji, Nami, Usopp y Brook estaban reunidos en la madrugada de noche buena, Franky había hecho el regalo de Chopper y ya estaba debajo del pino, pero no sabía qué hacer con la puerta que había construido para su capitán.

-Zoro, tú lo conoces mejor que nadie, ¿de verdad crees que quiera una puerta? -preguntó Nami.

La verdad es que, al igual que Makino hace ya algunos años, nadie podía haber descifrado el peculiar deseo de su capitán, ninguno había entendido para qué quería una puerta, ¿acaso las del Sunny no les gustaban?

-No lo sé, lo mejor será esperar a que despierte y ver qué era lo que significaba su carta.

Y esperaron, esperaron y esperaron. Luffy por primera vez despertó sin la necesidad del olor de la comida, el capitán estaba despierto tan pronto como el sol salió. Saltó de su cama y corrió a la puerta del cuarto de niños para pararse de golpe, Luffy tomó aire, agarró la perilla con los ojos cerrados y lo soltó. Al abrir los ojos no había nada fuera de lo normal, no pasaba nada, aún quedaban puertas.

Luffy estuvo toda la mañana abriendo las puertas del Sunny, tomando aire, cerrando los ojos, agarrando la perilla, abriendo la puerta, soltando el aire y abriendo los ojos. Hizo todo eso con cada una de las puertas de Sunny, todo bajo las miradas curiosas de su tripulación. Hizo todo esperando ver a alguien, pero no recibió ninguna risa, ninguna cara familiar, del otro lado no estaba ni Shanks, ni siquiera el fantasma del calor de su hermano. 


A.N. 

Fun Fact la idea del deseo de la puerta viene de mi, yo de chiquita pedí una puerta de Navidad para irme a ver a mi prima que se había mudado a EUA. 

Espero hayan disfrutado de la lectura, cuídense mucho los tqm, ¡besos! <33

Querido SantaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora