~Llantos~ Capitulo 11

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¿Por que tenía que jugar así conmigo? Sonrió malvadamente. Tenía tanto sentimiento, quería llorar, quería estar en una habitación encerrada, como siempre lo hacía. Pero, logicamente, aquí no podía, tomó mi mejilla donde me había lastimado, me miró a los ojos. Después me soltó.

Harry : Ve a lavarte la cara. Vamos a salir.

Me fuí lo más rápido posible, entré al baño, me miré en ese espejo, tenía la cara llena de moretones, mis ojos, con unas grandes ojeras negras, rasguños en los cachetes, igual que esa chica, esa chica no era nadie más que yo. Ella era yo. Todo lo que ella estaba haciendo, yo lo tengo ahora. Me lavé la cara, pero se veían todos los moretones. Terminé gritando y llorando, preguntando por que me pasaba esto a mí. Harry entró al baño y me miró tirada llorando.

Harry : Te dije que lavaras la cara, pero con agua, no con tus lágrimas sucias.

___: ¿Como quieres que salga ? ¿Con moretones? ¿Para que la policia te lleve a la carcel? Vamonos así. Estoy lista.

Harry : No soy idiota. Toma.

Me aventó un maquillaje, me pegó con el en la cabeza.

Harry : Rápido.

Cuando estaba lista, me cepillé el cabello. Salimos del baño.

Harry : Bien, quiero que te comportes bien, no como la ultima vez en el aeropuerto.

____: ¿O como en el restaurante?

Harry : ¿Cual restaurante?

"Fue un sueño, todo lo bonito que se dijieron fue un sueño"

___: Nada.

Salimos, llegamos a un restaurante. Harry pidió su orden y la señora le dió el boleto para la mesa 17. Nos sentamos, estaba callada, no tenía ganas de hablar.

___: ¿Puedo ir al baño?

Harry : Fuiste en la casa.

___: Prometo no irme.

Harry : Tienes 10 minutos exactamente.

Me encontraba en el baño, en ese baño se encontraba una salida por si había una emergencia. Me lavé la cara, "Vamos. Corre" la puerta estaba abierta. Mi corazón latía demaciado rápido. "Ya no tendrás daño alguno. Tu puedes. "
No conocía a nadie allí. Pero había salido, salí de aquel restaurante. Todas las personas que estaban allí me miraban. Las ignoré, solo buscaba un policia. Mi estomago ardía. Estaba escapando de Harry. Me llené de felicidad por que no lo veía por ningún lado. Comenzé a llorar mientras caminaba en la fría noche, había estada mucho tiempo por las calles, que ya había llegado la noche. Las luces brillaban, las estrellas estaban más que llenas de vida, la Luna estaba hermosa, veía parejas, niños ir a casa. Poco a poco las personas disminuian, tenía frío, en mi cara habían lágrimas, mis pies me dolían de todo lo que había caminado, y me ardían por los agujeros que tenía gracias a los clavos. "Estas sana, solo sigue caminando" Esa voz, al parecer, jamás me traicionó, me daba consejos. "No mires atrás" Llegué a un lugar. En ese lugar no había casas ni personas, era tipo bosque, corrí, me adentré más en el.

SÍNDROME DE ESTOCOLMODonde viven las historias. Descúbrelo ahora