¿Son mis manos o las tuyas las que estan atadas?

Prólogo

Siente más que ver como Tom se acerca a él.

Conoce su forma de andar mejor que la suya, pasos largos, rápidos pero sin parecer apresurados sino más bien le dan un aire de ser inalcanzable, resuenan dando a conocer su presencia y de ninguna forma parecen vulgares o escandalosos. Tom camina como si fuera dueño del mundo, como si fuera dueño de Harry.

Su magia es tan poderosa que puede sentirla físicamente, se entrelaza alrededor de su cuerpo y le hace saber que su dueño lo esta mirando.

"Cuidado, Harry. Debes comportarte."

Mentiría si dijera que detesta eso, es imposible odiarlo cuando ha logrado lo que nadie ha podido. Siempre le dijeron que era especial, poderoso, talentoso, único. Jamás estuvo de acuerdo hasta que tuvo a Tom Riddle entre sus manos.

Tom que es inteligente.

Tom que es talentoso.

Tom que es poderoso.

Tom el Head Boy.

Al final del día se arrodilla ante Harry Potter y le promete el mundo. Acaricia su cuerpo, magia y alma como si fueran sagrados.

Lo mira con un fanatismo religioso embriagador. Protege su ser de cualquiera que desee dañarlo o lo codicie.

Oh, pobre Tom. Tan astuto Slytherin, pero tan ingenuo al amar.

No sabe que es Harry él que le permite tener el control. No comprende que es seguidor y no dios.

Así que Harry se permite bailar este vals.

Donde Tom pretende ser dios.

Y Harry disfruta de su devoción.

Al final, merece ser amado por alguien alguna vez...