Capítulo 2: ¿Y tú eres...?

87 7 2
                                    

Al día siguiente, todos fueron a casa de Jeongin. Jisung y Felix se encontraban jugando videojuegos en el sofá del salón de la casa mientras Jeongin y Hyunjin preparaban algunos snacks en la cocina.

Todos estaban concentrados haciendo algo, cuando el fuerte sonido del timbre los desconcertó.

— ¿Esperas a alguien, Jeongin? — preguntó Felix—.

— Que yo sepa no, ¿quién será?

El peliazul se acercó a la puerta mientras los tres rubios observaban atentos. Jeongin giró el pomo y observó la imagen de la chica por la cual deliraba.

— ¡Hola Innie! ¿Vengo en un mal momento? Veo que estás con tus amigos —dijo la morena observando a los chicos en el interior de la casa mientras los saludaba—.

— ¿Y tú eres...? —preguntó cortante Hyunjin—.

— Ella es Eunji, idiota —respondió Felix dándole un pequeño golpe en la cabeza al rubio—.

La chica sonrió algo extrañada por la situación.

— Discúlpales porfavor —sonrió incómodo el peliazul— ¿necesitabas algo?

— Realmente no, pero como somos vecinos y no nos conocemos mucho, venía a invitarte a una fiesta que haré esta noche en mi casa. También me gustaría que viniesen tus amigos, si ellos quieren, claro.

— Por supuesto que quieren, ¿a que sí, chicos? —preguntó el menor mirándolos de una forma que daba miedo—.

— L-Losiento pero no me gustan mucho las fiestas...—dijo Jisung apenado—.

Y era verdad. Al rubio le aterraba la idea de estar rodeado de gente, sobretodo si no conocía a nadie. Este tipo de situaciones hacían sentirle muy agobiado y mareado, por eso prefería evitarlas a toda costa.

— Porfavor ven, te prometo que será muy divertido —insistió la chica intentando convencerlo—.

— Me lo pensaré...

— ¡Muchas gracias! Entonces, os esperaré a todos esta noche. ¡Les veo en la fiesta!

La chica dio media vuelta y regresó a su casa, seguramente para hacer los preparativos.

Los chicos miraron al rubio algo molestos por no haber aceptado la invitación.

— Irás a la fiesta, ¿cierto? —dijo el peliazul muy cortante—.

— Jeongin, sabes de sobra que no me gustan las fiestas —dijo Jisung molesto— además, no me gustaría tener dolor de cabeza después.

— Porfavor Sung, os necesito a todos conmigo esta noche, es importante para mí.

Las palabras del menor hicieron sentirse culpable a Jisung. Su amigo había conocido por fin a una chica dulce y bonita, y el rubio se sentía obligado a ayudarle, después de todo el peliazul también le había ayudado mucho, y para eso estaban los amigos.

— Me lo pensaré —dijo Jisung de forma pesimista— pero no prometo nada.

— MUCHAS GRACIAS SUNG —dijo emocionado Jeongin—.

Eufórico, subió rápidamente las escaleras hacia su habitación para empezar a preparase para la noche, dejando al rubio maldiciendo lo que dijo anteriormente. ¿Como es que estaba accediendo a ir a una fiesta en casa de alguien que acababa de conocer?

Dejando sus pensamientos a un lado, Jisung volvió de inmediato a su casa junto a Hyunjin para prepararse, ya que necesitaba la ayuda de su amigo para vestirse. ¿Que se suponía que debía ponerse, si nunca va a ninguna fiesta?

— Entonces, ¿como se supone que debo ir vestido?

— Deberías ir lo más sexy posible, pero haremos una excepción ya que es la primera fiesta a la que vas después de mucho tiempo. ¿Que tal si vas con unos vaqueros y una camisa blanca? Es sencillo y no llama la atención —dijo Hyunjin fingiendo ser diseñador de moda, estilista o algo por el estilo—.

Aunque no fuese a llamar la atención, el miedo seguía persiguiendo a Jisung, pero, ¿será solo una noche, verdad?

Decidido, se vistió tal y como Hyunjin describió su vestuario, junto a sus converse negras favoritas.

Hyunjin también se preparó, luciendo casi el mismo vestuario que su amigo.

[...]

Al llegar la noche, los dos rubios caminaron hasta la casa de la chica, donde el pecoso y el peliazul les esperaban justo en la entrada.

— ¿Están listos? —preguntó emocionado Felix—.

— No, pero todo sea por Jeongin —dijo sonriendo Jisung al mismo tiempo que miraba al peliazul—.

Jeongin le devolvió la sonrisa, y le agradeció a todos por acompañarle.

Por fin entraron a la casa, y se sorprendieron mucho al ver que era más grande de lo que parecía desde afuera.

Había mucha —demasiada— gente en todas las estancias de la casa, pero lo que más lleno estaba era el salón. Todos bailaban al ritmo de la música que sonaba de fondo mientras sostenían sus bebidas. El ambiente era animado, cosa que hizo que los chicos también se animasen.

Jeongin tomó del brazo a Jisung y lo llevo al centro de la sala, donde el peliazul comenzó a bailar, y el rubio copió sus pasos, intentando soltarse un poco para no estar incómodo.

Los demás también se unieron, y bailaron por horas.

Hola! Quería decirles que les agradezco mucho por el apoyo que le están dando a la historia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Hola! Quería decirles que les agradezco mucho por el apoyo que le están dando a la historia. Sé que no es mucho, pero tan solo con 1 voto o 1 comentario ya estoy agradecida, ya que estoy escribiendo por diversión, así que agradezco mucho que lean la historia <3 Enserio muchísimas gracias por todo, nos leemos!

After Party ♪ MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora