La vida da demasiadas vueltas- la odio !

Chico nuevo

Después de un día de descanso me levante a las para empezar el día. El sol ya había salido y hacia calor a si que cogi unos shorts negros y una camisa blanca me solté el cabello y me hice una pequeña trenza en el costado y la agarre con una pinza por detrás y tape la pinza con un mechón de pelo. Me puse unas converse all stars negras. Me maquille y baje a desayunar. Luego cogi la mochila y salí con ella a la espalda. Llegue al instituto y me encontré con Paula ,llegamos juntas a clase nos sentamos y de repente entro un chico al que no había visto nunca, le diriji una corta mirada y continúe hablando con Paula. Era alta Moreno de ojos color café llevaba el uniforme y parecía un tanto desorientado. No le preste demasiada atención. El profesor entro y la clase comenzó. Nada mas empezar comentó que había un alumno nuevo y le ordenó presentarse, era aquel chico del uniforme. Se llamaba Pablo y se había trasladado al País vasco desde Madrid. Después de aquello las clases continuaron. Al comenzar el recreo salí por la puerta de atrás de la clse para llegar a la clase de Mateo. Pasamos todo el recreo comentando mi extraño sueño y al parecer Pablo se encontraba cerca y debió de escuchar algo porque al entrar a clase me pregunto por un sueño extraño que había tenido. Le dije que no podía hablar y me fui. Después de las clases me fui con Clara a casa. Mi madre me comento que se había mudado una familia al vecindario y que me fuera a presentar. Eso mismo hice después de comer y darme una ducha. Me disponía a tocar el timbre cuando la puerta se abrió y un chico salió corriendo tirándome al suelo. Enseguida se dio cuenta y se disculpó. Dijo que tenía prisa así que le deje marchar. Era un poco bajo, rubio, con los ojos color cían y con una sonrisa apacible. Cuando se fue salió una mujer un tanto mayor con el pelo agarrado en un moño y con un delantal. Le conté que era su vecina y que había venido a darles la bienvenida. Era muy amable y agradable, me invito a pasar y allí encontré a Pablo recogiendo unas cajas me miro y me saludo. Aquella mujer era su madre. Estuve allí un rato comiendo unas galletas y luego volví a casa. Al día siguiente le conté a Paula que Pablo se había mudado a mi vecindario y ella no pudo evitar soltar una risilla. Cuando entre al aula Pablo se me acerco.
- Hola, Lil
- Hola.
- Oye, perdona por lo de mi hermano ayer, tenía mucha prisa y no se dio cuenta y ...
- No importa, estoy bien. ( era muy amable que se disculpara pero a el no le incumbe nada lo que su hermano me haya hecho, el no tiene la culpa )
- Déjame compensártelo, quieres venir al cine mañana.
Pero que dices ! Esto no es por tu hermano...
- No, lo siento he quedado con clara, además no tienes que compensar nada. Fue tu hermano no tu y de todas formas no fue nada.
- Esta bien .
Se le veía un poco apenado pero no me apetecía quedar con el después de que utilizará la excusa de su hermano.