two

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Cuando TaeHyun no aguantó más y metió la mano dentro de su pantalón, BeomGyu tragó saliva nervioso. él sabe que también puede tocarse, que TaeHyun no lo juzgará, ambos podían correrse juntos y eso no afectará su relación, pero él no quiere pasar vergüenza. no quiere que TaeHyun se burle de él o lo mire raro. por eso él sólo juguetea con su mano, haciendo una leve presión fuera de su ropa.

De un momento a otro TaeHyun dejó la tranquilidad y comenzó a masturbarse rápido y ruidoso, sus gruñidos y gemidos eran fuertes, lo suficiente como para alterar a BeomGyu. cuando TaeHyun estaba apunto de llegar su celular comenzó a sonar. maldijo internamente y con su otra mano contestó, pausó el vídeo antes y no se molestó en sacar la mano de su pantalón.

“¿qué quieres?”, era YeonJun, su mejor amigo.

“sólo quería preguntarte si quieres salir, iremos a beber y ya sabes, puedes-”

“no.”, colgó rápido y aventó el celular después de reproducir de nuevo, “maldición, estaba tan cerca, ah. BeomGyu, ¿estás cerca igual?”, por respeto a su menor él no miró hacia su compañero, pero quería hacerlo por curiosidad, más resistió.

“en realidad, éste vídeo no es tan bueno. voy a, iré a mi habitación a estudiar, suerte consiguiendo eso.” escapó rápido y TaeHyun lo miró desconcertado mientras bajaba sus pantalones, ahora solo podría disfrutar más.

Dentro de su habitación BeomGyu desesperado se despojó de su ropa y corrió por el lubricante, cuando estuvo listo introdujo sus dedos dentro de sí y se tocó rápidamente, unos jales a su pene fueron suficientes para correrse tan precozmente que se avergonzó de sí mismo.
cuando escuchó el gemido grave de TaeHyun seguido de un, “mierda, sí”, apretó de más su miembro aún duro. ¿por qué se excitó viendo a su roomate pajearse?, nunca había tenido ese tipo de pensamientos hacia TaeHyun, hasta que escuchó sus gruñidos y se le antojó escucharlos a su espalda, mientras lo follaba en sus manos y rodillas. bueno, ahora tendría que hacer una siguiente ronda si quería quedar tranquilo, afortunadamente no tenía que esforzarse mucho, él llegaba al orgasmo muy rápidamente.

precoz.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora