Benji

Ronroneos

08/02/22

Capítulo 5

Ronroneos

Nota: ok, no he escrito en mucho tiempo lo admito, pero me enfoqué en otras cosas y ya entré a clases presenciales, tuve mi primer proyecto, en este justo momento estoy escribiendo en mi hora libre de la escuela aiuda, espero les guste.

Nota 2: capítulo corto pero bonito uwu próximo capitulo, celos.

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Pov's narradora

Si hay algo que Kenji adora es sentir el pequeño temblor del cuerpo de su pareja por las mañanas y sus tiernos ronroneos que salen de sus rosados labios, esos dulces sonidos normalmente se dan en momentos de comodidad y seguridad, pero en isla nublar esos espacios de tiempo fueron muy escasos, debían estar alertas todo el tiempo y la seguridad nuca era algo permanente o seguro, cuando menos creían estaban corriendo por sus vidas. Pero también había momentos íntimos en la comodidad de su nido que estaba escondido, donde ambos se dedicaban un poco de amor y tiempo.

Para Ben fue extraño sentir y escuchar el ronroneo de un gran alfa, aún más uno como Kenji, lo hizo sentir especial y por que no admitirlo, un poco dominante. Estaba mal visto que los alfas dieran esa muestra de debilidad y poco masculino, los hacia ver débiles y sumisos antes los ojos de los demás, es por eso que lo hacían con sus parejas a solas, pero a Kenji no le importaba estar rodeado de gente y demostrar su afecto por su omega con un gustoso y sonoro ronroneo.

Cuando Kenji ronroneaba se acurrucaba en el regazo del omega o se frotaba contra él, buscando su calor y aprobación, Ben no decía nada sobre el claro abandono afectivo del que sufría su pareja, solo le ofrecía sus brazos y su tiempo, cada que esto pasaba Kenji se comportaba como un pequeño necesitado de amor y afecto, y a Ben no le importaba dárselo.

En cambio, para el omega era más difícil dejar en claro una muestra de afecto tan bochornosa, siempre fue muy púdico con el contacto, no le gustaba que lo tocaran ni tampoco le gustaba tocar a otras personas, esto cambio después de vivir a la intemperie el solo durante dos meses, pero se había vuelto ''valiente'' y muy asertivo. Actuaba agresivo con todos, ni que decir de intentar acercarse, se comportaba como si hubiera olvidado como convivir con otros seres humanos.

Por eso Kenji fue muy feliz cuando después de un momento algo subido de tono lo escucho ronronear, su cabeza sobre su pecho con el cabello desordenado, algo de sudor en sus cuerpos y una cara de satisfacción. Se sintió el chico mas feliz del planeta. A pesar de que Ben se desenvolvió de nuevo no solía hacer esto muy seguido, mucho menos en público, pero siempre le dejaba en claro cuanto lo amaba y como disfrutaba estar con él.

Cuando volvieron a la civilización las personas los veían raro por sus nuevos hábitos, un alfa que se la pasaba pegado a su omega buscando mimos como un niño, ronroneando de gusto por el tacto y la atención, y a un omega reacio a las muestras de afecto hacia él, siempre con una cara seria y de superioridad, con una sola mirada te hacia sentir intimidado, pero su estatura y su linda cara hacían que no diera tanto miedo.

Esa mañana Kenji dormía a pierna suelta, tenia un sueño profundo la mayoría del tiempo, le costó acostumbrarse de nuevo, amaba dormir. Debía tener sus 10 horas de sueño o se levantaba de mal humor, por eso se quejó algo enojado cuando sintió un golpe en su rostro, había un trasero en su cara, hubiera sido mejor si ese trasero fuera el de su esposo, pero lamentablemente ese no era el caso.

Bajó el cuerpo de su cara y se acomodó en la cama, ¿Cuándo se había subido Xi en su cama? Su pequeño hijo era tan desordenado para dormir como él, se había vuelto a acomodar en una graciosa pose que dudaba fuera cómoda, parecía como si lo hubieran estrellado contra el suelo.