Prólogo

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Loreline

- Debes atender esa mesa de allá - mi jefa me señala la mesa donde se encuentra un hombre rubio que acaba de llegar.

- Ya acabó mi turno - le digo en forma de queja, cualquiera le tendría miedo a su jefa o jefe pero yo no, Alex tiene 38 años y siempre ha hemos tenido mucha confianza e incluso ella a ratos dice que es soy su sobrina pérdida ( dice que está muy joven para ser madre)

- Lo se cariño, pero Joana va a llegar un poco tarde por que esta en una cita médica, así que me pidió que te dijera que la cubrieras solo hasta que ella llegue -

Joana es mi amiga y compañera de trabajo ella y yo nos cubrimos en todo así que sabe que no podría decirle que no aunque la idea de volver más tarde a casa no me agrada mucho.

Mi trabajo consiste en ser mesera en una cafetería, es solo un trabajo de vacaciones pero mi horario es de 4:00 PM hasta las 6:00 PM debido a que soy menor y mi casa está un poco lejos ( no tanto) Alex no me quiso dar un horario tan tarde pero la cafetería suele abrir a las 3:00 PM y a esa hora suelo estar en entrenamientos de fútbol solo me queda este horario.

- Entonces, ¿La vas a ayudar?- Alex me devuelve a la realidad, con un suspiro cogo la libreta y el esfero y me acerco a la mesa.

En cuanto llegó el hombre rubio alza su vista hacia mí y en cuanto eso pasa me siento algo intimidada por su mirada, sus ojos son grises pero de esos grises claros, me recuerdan a las tormentas y no sé por qué.

Me aclaró la garganta y le sonrió a lo que el me da una sonrisa pero de medio lado.

-Buenas tardes ¿ya se decidió por lo que quiere pedir?- trato de que no me tiemble la voz, estoy muerta de miedo y no tengo idea del por qué.

- La verdad aún no, ¿qué me recomiendas tú?- si sus ojos me intimidaron no puedo explicar lo que hace su voz, es ronca pero tan fría que tengo que hacer un esfuerzo por no ir a esconderme detrás de Alex.

- Amm, la verdad los clientes suelen  irse más por el "coffee desert" si le gusta el café claro - El sigue mirándome con esa sonrisa.

- Me encanta el café de hecho creo que es una de mis cosas favoritas - No digo nada, solo miro mi libreta esperando que pida ya y pueda irme - Bueno entonces dame eso, preciosa - El termina al ver que no le respondí nada, alzó mi mirada de nuevo y el ensancha su sonrisa.

-¿Algo de tomar?- pregunto por seguir el protocolo aunque la verdad no me importa si quiere algo de tomar o no solo quiero irme lejos de él.

- No, pero ¿Podría hacerte una pregunta?- Eso no me sorprende tanto, tal vez quiere que le resuelva alguna duda con algo del menú.

Le indico que si con la cabeza y el prosigue -¿Tu mamá es Miriam Alcázares?- Eso si me coge desprevenida ¿Por que carajo me pregunta eso y como sabe el nombre de mi mamá?

- No suelo responder ese tipo de preguntas a extraños- lo miro con el  entrecejo fruncido y el sigue sonriendo, al diablo la amabilidad todo en este tipo grita "corre"

- Tranquila, preciosa, no te pongas a la defensiva solo era una pregunta, es que digamos que somos buenos amigos y tú eres la copia exacta de ella cuando era joven- Sigo sin creerle ni la hora así que decido no responder nada y enfocarme en lo que pidió.

- Entonces, ¿Solo le traigo el coffee desert?- el se ríe y niega con la cabeza.

-¿Tan rápido evitando preguntas?- si no fuera un cliente hace rato le hubiera dado con la libreta y hubiera salido corriendo.

- No suelo responder preguntas de esas a desconocidos y si me disculpa iré a traerle su pedido- estoy a nada de darme la vuelta pero el se para.

Es mucho más alto que yo le pongo que mide unos 1.80 de altura, me doy la vuelta y cuando estoy a nada de irme  me agarra de la muñeca y me hace girar quedando muy cerca de mi boca.

- Ya nos volveremos a ver, preciosa- me susurra muy cerca de mi boca -Ah y eso es cortesía por ser tan amable- me da una última sonrisa antes de soltarme y desaparecer por la puerta.

Miro hacia la mesa donde dejó el dinero de lo que valía el postre que iba a pedir, miro extrañada hacia la puerta donde desapareció, ¿Quien es ese tipo y por que me acaba de decir eso?



Hola, soy Loreline y esta es mi historia que empieza en ese día donde cambio todo, donde conocí a mi secuestrador y dónde supe que nada iba a volver a ser igual jamás. ¿Listos para conocerme más y vivir todo esto conmigo? Espero que sí, por ahora solo ten en mente algo, Raymon solo significa una cosa: Peligro.

No te dejes envolver ni confíes en nadie ni siquiera en mí...

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