Capítulo 15. Actuar como nada que temer

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Lo que dijo Zuo Bo sobre la bomba de repente despierta el interés de He Jingyan. Miró a Xu Yangyi en sus brazos y curvó los labios, "Explotará una vez que el prisionero tenga la idea de huir, ¿verdad?" Murmuró con un profundo interés y peligro en sus ojos.

Por el momento, Xu Yangyi tembló un poco en los brazos de He Jingyan. De hecho, ya se había despertado cuando habían estado afuera de la puerta; sin embargo, fingió estar dormido para darse cuenta de las circunstancias.

'Maldición. ¿Qué quiere hacer este maldito imbécil? Xu Yangyi estaba aterrorizado y resentido por dentro, aunque no podía ver la expresión de He Jingyan. Sin embargo, no era el momento adecuado para que él se despertara. Como decía el dicho, "un poco de impaciencia estropea los grandes planes", por lo que estar tranquilo era lo único que se suponía que debía hacer por ahora.

Zuo Bo levantó la vista al escuchar eso y luego miró instantáneamente a Xu Yangyi.

¿Pretende atar a este hermoso hombre? ¿Es eso lo que está en la mente de He Jingyan?' Zuo Bo se rio y pensó que era difícil de creer.

Long Shen también. Miró a He Jingyan con asombro en sus ojos.

'¿Es él el verdadero He Jingyan? ¡Es realmente sorprendente que quiera atar a alguien a él, especialmente a un hombre!

Aunque sintió las miradas de Zuo Bo y Long Shen, He Jingyan seguía teniendo una cara serena. Levantó la barbilla de Xu Yangyi con los dedos y sonrió: "Tengo curiosidad por saber si todavía se ve bien con esa muñequera". ¡Qué hombre rebelde!

Mientras tanto, Xu Yangyi torció la boca y pensó: '¿Este hombre es un psicópata? ¡Maldición! ¿Me casé con un psicópata?

"Sería una gran lástima que este joven de huesos finos explote, entonces, ¿qué tal si me lo dejas para divertirme antes de eso?" Zuo Bo se rio entre dientes y dijo alegremente.

Sin embargo, Long Shen sonrió al instante: "¡Tal vez nuestro coronel te lo dejaría después de que te rompieran los brazos y las piernas, escoria!"

'Long Shen también lo ha dicho antes, ¿cómo todavía tuvo el descaro de llamar escoria a Zuo Bo?'

Nota del editor: porque es un miserable igual que Zuo Bo hahahaha

En el momento en que los dos hombres pensaron que He Jingyan no aprobaría la solicitud, He Jingyan dijo de repente: "Si me aburro de él, tal vez te lo deje por diversión". Puso una sonrisa malvada. Sin embargo, en este momento, He Jingyan recibió una bofetada en la cara con un fuerte sonido que resonó en la habitación. Luego sonó un aullido furioso de Xu Yangyi, "¿Déjarme con él para divertirse? ¿Soy una maldita mercancía tuya? ¿O una esclava sexual? He Jingyan, bastardo, vete al infierno". Xu Yangyi hervía de rabia con los ojos bien abiertos, y mientras tanto estaba a punto de darle a He Jingyan una segunda bofetada. Sin embargo, He Jingyan detuvo con calma la bofetada y le sonrió complacientemente a Xu Yangyi, "Cariño, entonces estás despierto". Con una sonrisa aún más amplia, He Jingyan no estaba irritado por la bofetada como si ya supiera que Xu Yangyi había fingido estar dormido.

"¿Quién es tu cariño? Bájame, bastardo. Poniendo una mirada feroz y haciendo gestos amenazantes, Xu Yangyi golpeó las manos de He Jingyan y se puso de pie. Sin embargo, de repente estaba sentado en el regazo de He Jingyan en una posición erótica, lo que lo hizo sonrojarse de vergüenza y luchar por escapar. En este momento, He Jingyan sostuvo la cintura de Xu Yangyi con sus grandes manos, pellizcó la barbilla de Xu Yangyi para besarlo y finalmente levantó una sonrisa astuta y molesta después de eso.

Xu Yangyi torció la boca y volvió a abofetear a He Jingyan en la cara sin dudarlo: "Te lo advierto, He Jingyan. Si sigues jugando conmigo, no seré tan educado contigo.

'Este hombre definitivamente está loco. ¡Soy un hombre, un hombre!

"Cariño, ¿alguna vez has sido cortés conmigo? ¡Cariño, no te haré nada malo, así que no hay necesidad de que seas violento!" Después de eso, He Jingyan, tan sereno como siempre, levantó la cadera de Xu Yangyi para que Xu Yangyi se acercara más a su propio cuerpo. Luego, las grandes manos de He Jingyan comenzaron a correr sobre el cuerpo de Xu Yangyi, lo que hizo que Xu Yangyi se enfureciera y las venas en su rostro se abultaran.

'Este bastardo, definitivamente lo mataría solo', pensó Xu Yangyi para sí mismo.

La novia sustituta del coronel He - PARTE 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora