The lonely ghost || Tommy & Ranboo

Alone at home

| When Ranboo's not at home |

Los días de semana siempre eran aburridos para Tommy, Ranboo se iba temprano a sus clases y volvía demasiado tarde, y cuándo llegaba, se iba a dormir.
Esa mañana Tommy estaba tratando de combatir el aburrimiento, y a pesar de tener la televisión a su completa disposición, le aburría ver películas sin Ranboo. No tenía a nadie que le explicara qué estaba pasando.
Suspiró, sabía que no podía ir con el humano a sus clases, y tampoco a su trabajo. Eran unas de las reglas que el chico había puesto para poder mantener la buena convivencia durante su estadía.
Pensó lo suficiente como para que le doliese la cabeza, y refunfuñó pues pensaba que ya al ser un fantasma no tenía que lidiar con ese tipo de cosas. Pero al parecer le había ayudado a recordar a alguien a quién podía visitar cada que quisiese: El viejo sabio que había conocido una vez murió.

Tras unos pocos segundos, su entorno había cambiado por completo. Ahora en vez de estar en la sala de estar de Ranboo, estaba en un lugar completamente blanco, parecía completo vacío. Giró la cabeza unas cuántas veces y se encontró de cara con una puerta de madera un tanto gastada, y con una sonrisa, la abrió.
Entró en un lugar igual al que había estado antes, sólo que a diferencia de ése, ahora había un escritorio de oficina y dos sillas junto a éste, una delante del mueble y la otra detrás. En la silla que estaba detrás, se encontraba un hombre de cabello rubio y corto, con un poco de barba y una sonrisa lo suficientemente amable cómo para hacer que Tommy le confiara todos sus secretos y pensamientos.

— ¡Phil! — Dijo corriéndo al escritorio y tirándosele encima.
— ¡Woah, Tommy, esper-! — Cayeron de la silla, pero durante una fracción de segundo, todo se puso oscuro y daba vueltas, hasta que Tommy volvió a la normalidad, pero ésta vez estaba sentado en la silla que debía, y Philza estaba mirándolo fijamente.
— ¡Lo siento! Estaba aburrido — El hombre suspiró mientras Tommy rascaba su nuca avergonzado.
— ¿Qué necesitas saber hoy? — Se acomodó en su silla, apoyándose en el respaldo de ésta y volviéndo a sonreír.
— Oh, ¡sólo quería des-aburrirme! ¿Está Foolish por aquí? — Miró a todos lados buscándo a la persona que mencionó. Philza asintió.
— Estaba hace un momento aquí, pero tuvo que ir al barrio nº970.367. Está remodelándolo.
— Ow...¿Y quiénes están? — Ahora estaba un poco más desanimado, pero tras lo que dijo Philza, volvió a sonreír.
— Creo que está el demonio que se llamaba...uh- ¿Bad?
— ¡Bad! ¡Genial! — Y despues decir eso, apareció una puerta de la nada junto a Philza, la cuál se abrió y un chico de piel cómo azabache y ojos tan blancos cómo ese vacío apareció.
— Oh, Tommy — El demonio sonrió levemente. — Justo estaba visitándo a alguie-...
— ¡Hey Tom! — Detrás de Bad apareció alguien más, éste a diferencia del demonio, parecía más humano. — Hace un tiempo que no nos vienes a ver.
— Skeppy, creí que te quedarías en tu casa humana disfrutándo de tu vida humana. — Se movió para dejar entrar al chico, y una vez ambos estuvieron fuera, la puerta desapareció.
— Ah, bueno, ¡aquí no pueden decirme nada, jaja!
— Espera, ¿casa humana? ¿Volvió a romper las reglas? — Miró a Bad y a Philza, éstos asintieron.
— Se le ocurrió soltar las almas en el mundo humano y ahora están vagándo por ahí sin saber qué hacer. — Suspiró, con un sólo movimiento de su mano, dos sillas aparecieron junto al escritorio, y se sentó en una de ellas.
— Bueno, los de Abajo no tienen nada qué hacer, es cómo si no tuvieran trabajo, y yo les dí uno. — Rió junto a Tommy.

Pasaron un rato hablándo, y ese rato muy pronto se convirtieron en 15 horas. En ese lugar no habían relojes, por lo que Tommy no sabía cuánto tiempo había pasado.
Durante ese tiempo, llegaron más 'personas' al vacío, cómo Sapnap el demonio, George el mensajero, y Quackity el ángel, eso hizo su estadía mucho más divertida y duradera.

— Tommy, creo que ya es hora de que vuelvas, pasar mucho tiempo en la frontera entre El Arriba y El Abajo no es muy bueno, en especial para ti. — Dijo Philza en un momento más tranquilo, Tommy suspiró — Y tu amigo humano llegó a casa hace quizás 6-7 horas.
— ¿¡Qué-!? — Lo miró espantado, ¿enserio pasó tanto tiempo allí? — Todos asintieron — ¡Muy bien, yo debo irme! ¡Nos vemos pronto, gracias!

Lo despidieron con la mano, y una puerta apareció delante de él, dándole paso a la casa de Ranboo.
Los chicos se miraron entre todos, no sabían bien qué pensar.
"¿Es posible que vaya a cualquiera de los dos lados?"
"Lo dudo, pero al menos tiene buena compañía al parecer."
"Creí que nunca sucedería algo así nuevamente. Desde Philza."
"Bueno, si es que no llegan a una conclusión, ¡podrá ayudarme aquí!"
"¿Pasar toda la eternidad con Phil? Qué afortunado"
"Idiota."
"Gracias Phil"

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