¿Usted Que Haría?

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Prólogo.

Miren, si en esta vida
Nos dieran otra oportunidad
... Miren, si se pudiera
Parar el tiempo
Volverlo atrás.

Miren, si se pudiera
Con experiencia recomenzar
... Miren, si se pudiera
Borrar las cosas
Que hicimos mal.

Usted que haría?...
¿Usted que haría?...
¿Usted que haría?...
¿Usted que haría?

Era una tarde de sábado, nada importante sucedía, sus hijos estaban fuera y él realmente no encontraba motivación para salir. Trapeaba el piso matando tiempo mientras reproducía canciones aleatoriamente.
Su mente aburrida simplemente se dejó llevar por la letra de la canción que escuchaba, formando inconsciente una pregunta en sus pensamientos:

Si pudiera regresar a un momento de el pasado ¿Que haría?

Yo correría a buscar
A la que fue mi amada
Y borraría con besos
Las penas que le daba
Yo haría tan solo
Lo que ella quisiera
Sería más bueno
Para que ella me adorada
Ah, ah, ah
Ah, ah, ah, ah.

Él ser de apariencia joven sonrió con ironía ante la letra negando con la cabeza con un atisbo de burla.

«Las pequeñeces por las que se preocupan los humanos si que son divertidas»
El control sobre el tiempo era una fuerza imposible deseada por todos, incluso las representaciones soñaban con este poder. Desperdiciar algo tan deseado, poderoso y peligroso en resolver un mal de amores era estúpido, para él.
Si algo así existiese el deseo de poseer el control sobre ello sin duda alguna desataría la tercera guerra mundial, consideró.

Pero, claro, no podía culpar al cantante ni a la raza humana en general por desear un poder tan grande para algo tan pequeño, después de todo, una raza simple tendría ese pensamiento simple. Patético.
Rápidamente rectificó ese último pensamiento, tachando la palabra una y otra vez en su mente. No debía olvidar que como una raza superior no era digno de él el menospreciar a otra especie más débil. ¿Y que si había humanos que realmente tuvieran ese deseo de arreglar cosas banales? Qué sus problemas tuvieran un matiz más complejo no era un motivo para pisotear a sus inferiores.
Claramente vergüenzas pasadas, amoríos fallidos, notas o resultados malos en cuanto a estudios u oportunidades desaprovechadas eran cosas que causaban mortificación a los humanos y él al tener un papel más importante tenia problemas a la altura. Claro que el también había tenido sus amoríos, sus vergüenzas, sus contratiempos e inseguridades, pero consideraba que había mejores cosas por las cuales arrepentirse.

Suspiró ruidosamente, intentando despojarse de la prepotencia que se le subió a la cabeza y volver al inicio.

Yo voltearia el muro
Que de ella me separa
Y borraría lo malo
Que de mí recordará
Nunca tendría
Amores con otras
Tan solo con ella
Ella nunca me engañaba
Ah, ah, ah
Ah, ah, ah, ah.

Regresando a la pregunta; En un mundo hipotético donde pudiera regresar al pasado, en algún punto de su historia ¿Él que haría?

Se sintió tonto, en serio se estaba tomando una simple letra de una canción muy en serio, pero el barco de la cordura ya habia zarpado y el estaba jodidamente aburrido. Mala combinación.

Entonces, ¿Él que haría?

Miren, si en esta vida
Nos dieran otra oportunidad
... Miren, si se pudiera
Parar el tiempo
Volverlo atrás.

Miren, si se pudiera
Con experiencia recomenzar
... Miren, si se pudiera
Borrar las cosas
Que hicimos mal.

Usted que haría?...
¿Y usted que haría?...
¿Usted que haría?...
¿Usted que haría?...

¿Que no haría?

Él arreglaría todos los errores que cometió en su vida, todo aquello que hoy lo mortificada, que lo persigue, que lo lastima, que lo ata a su pasado.
Empezando por el inicio de todo; La Conquista
La muerte de sus padres, tíos y primos. Por qué si México odiaba algo en esta vida, era ese sentimiento que se apoderaba de él en las noches, y en sus momentos de debilidad, el sentido de estar completamente solo.
Otras personas también habían sufrido junto con él, Agustín de Iturbide, por ejemplo.

Y si hubiera sido más fuerte estaba seguro de que la inseguridad nunca habría azotado al país de la manera en la que lo hizo. "Siempre te faltó mano fuete, tu pasividad será tu ruina" Dios, esa frase nunca lo abandonaría, tampoco el sentido de inferioridad que venía con ella. Estaba grabada tan vivida en su mente que pareciese que la escuchaba en vivo cada vez que la recordaba.

Igualmente continúo con la lista. Autoflagelandose.
La intervención de los Apaches.
La independencia de Texas, y su anexión a Estados Unidos. Aquella horrible guerra que culminó en la separación de siete de sus hijos, y la perdida de casi la mitad de su territorio. Ese pensamiento ni siquiera lo abordó. No, lo ignoró por completo, por qué se nuevo, era muy débil para afrontarlo.
No hay que olvidar las intervención Francesas, le recordó su cerebro.
La destitución del dominio indígena sobre sus tierras, bonito regalo de parte de Benito Juárez, quien se había cobrado las molestias que le trajo el haber separado al clero del estado.
También, cuando el rico se hacía más rico, y el podré más pobre; El Porfiriato.
Todas las bajas en La Revolución.
1926, la guerra cristera.
Otro acontecimiento vino, 1968. México rápidamente abrió los ojos, ya no queriendo recordar.
Aún así su mente vagaba y vagaba entre tragedia y tragedia.
Los temblores
Y claro, ¿Cuando no? Estados Unidos siendo Estados Unidos.
O sus tantos políticos corruptos, todos aquellos bola de ineptos que con cada mala decisión lo apuñalaban con una navaja.

Las lágrimas comenzaron a caer, soltó el trapeador de sus manos, respiraba violentamente y su cabeza le ardía, un ardor de odio puro.

Yo voltearia el muro
Que de ella me separa
Y borraría lo malo
Que de mí recordará
Nunca tendría
Amores con otras
Tan solo con ella
Ella nunca me engañaba
Ah, ah, ah
Ah, ah, ah, ah.

El recuerdo persistente de todos sus errores lo atormentaría para toda su vida, las sombras de todos sus fracasos convertidos en demonios lo perseguirían hasta su final.

Cuánto mal pudo haber evitado si no hubiera sido tan cobarde.

Que solo los bellos
Momentos recuerde
Las noches aquellas
Que en mis brazos palpitaba
Sueños son sueños
El tiempo no vuelve
Ya nunca tendré
El hijo aquel que yo soñaba
Nunca, ya nunca
El tiempo no vuelve
Yo tuve la culpa
Que una tarde me dejara.

Y por más que diera vueltas y vueltas en su cama por las noches el daño ya estaba hecho, su cuerpo, su territorio, su mente, todo él estaba completamente manchado de sangre. Y no importar cuántas veces suplicará perdón  o compasión. Nada lo salvaría del infierno que se lo tragaría vivo cuando el peso de todas sus negligencias lo alcanzara.

Sueños son sueños
El tiempo no vuelve
Ya nunca tendré
El hijo aquel que yo soñaba
Nunca, ya nunca
El tiempo no vuelve
Yo tuve la culpa
Que una tarde me dejara.

Finalmente enderezando su postura se secó las lágrimas de las mejillas, levantó el trapeador y aparentando ante la soledad de su casa que nada había pasado rápidamente forzoso su sonrisa.
Porque él era México, el país más alegre del mundo.
Había que guardar las apariencias, después de todo su vida era perfecta ¿No?, sin importar todo el sufrimiento que había detrás, los demás así lo veían, su gente y sus hijos lo amaban, todos lo amaban, porque nadie veía la realidad. México estaba bañado en sangre, pero eso no importa.

Porque México es completa alegría.

Usted que haría?...
¿Y usted que haría?...
¿Usted que haría?...
¿Usted que haría?.....

"¿Y Si...?" | México Donde viven las historias. Descúbrelo ahora