Eres Mi Destino - Eunhae +18

Capítulo 12

Hyukjae camino hacia su auto, entró con movimientos torpes y miró unos segundos al frente antes de cubrir su cara y ahogar un grito de alegría.

¿Acaso seguía dormido?

¿Acaso en cualquier momento su estúpido despertador lo iba a despertar indicándole que debía levantarse para ir a la cafetería?

Se dio un pellizco en el brazo para después sobárselo haciendo un gesto de dolor.

—no es un sueño – susurro – de verdad lo tengo de vuelta!

No pudo contener otro grito, suspiro con la alegría saliendo de su corazón.

Tomó rápidamente su teléfono y marcó a su hermana, tenía que contarle todo, estaba tan feliz que podría morir en ese momento.

—¿Qué pasó hermanito?

—lo tengo de vuelta – chillo al teléfono –

Hubo un silencio del otro lado antes de escucharse la risa de su hermana.

—bueno… me alegra, lo que no me alegraría es no volver a escuchar jamás, así que deja de gritarme al teléfono por favor – rio –

Asintió con entusiasmo, mordió su labio recordando los labios del menor, aun podía sentir ese agradable cosquilleo.

—… entonces, te necesito aquí pasado mañana

Se paralizó por un momento, no había escuchado nada de lo que su hermana le había dicho, mordió su labio de nuevo y arrancó el auto.

—¿es necesario que valla? – suspiro –

—eres el jefe de la empresa, no creo que los inversionistas quieren los gráficos de la hermana del jefe ¿no crees?

Suspiro un poco aliviado ya que su hermana le había vuelto a decir de lo que hablan.

—pero… jongwoon llega en tres días – hizo un puchero –

—lo se hermanito, pero los inversionistas lo quieren para pasado mañana, tienes que venir, lo siento, se que quisieras pasar mas días con el, y yo seria la mas feliz de que eso pasara, pero recuerda, tienes también una responsabilidad aquí…

Asintió sin ganas, esa era una de las razones por las que odiaba ser el jefe.

—de acuerdo, mañana saldré por la noche – suspiro –

Colgó con su hermana después de desearle buenas noches, condujo hasta su hotel y subió el ascensor recargándose en los espejos de cristal.

Su teléfono comenzó a sonar justo cuando este se abrió, lo sacó de su bolsillo y bufo al ver quien era, ni cuando no estaba junto a ella dejaba de fastidiarlo.

—¿Qué demonios quieres? – tocó el puente de su nariz y salió del ascensor de camino a su habitación –

—¿Dónde demonios estas? Mis padres están preguntándome que como estas que tu hermana les dijo que estabas estresado y me preguntaron, como si yo supiera algo de tu estúpida vida – suspiro enojada –

—sólo diles que estoy bien y a ti no te voy a estar dando explicaciones… - dijo con fastidio –

—soy tu esposa maldita sea – grito –

—de un estúpido matrimonio arreglado, mejor déjame en paz de una vez.

Colgó sin escuchar respuesta alguna, como podía ponerlo de mal humor con sólo saber quien era, pero ahora estaba demasiado feliz, por lo cual su enojo se disipó al instante al recordar la sonrisa de Donghae.