El Diario

Capitulo 1: Me llamo Alexa

He iniciado el año y lo que me recomendó el doctor fue que escribiera un poco en una libreta, que la volviera mi propio diario. ¿Para qué? Bueno, luego de tener una sobredosis mi cabeza pude verse afecta y cuando lo que consumes deja tu mente vacilando, creo que es normal pensar que podrías sufrir de perdida de memoria, no quería volverme una retrasada mental...así que escribiré lo que me trajo hasta este día...al menos todo lo que recuerde.

Creo que me desvió del tema, se preguntaran, si es que alguien llega a leer este diario ¿Qué paso? Si, todos quieren saber la historia detrás de como una joven de 18 años llega a consumir drogas a tal punto de que no puede ni caminar, hablar o siguiera respirar. No soy una adicta, al menos eso pensaba.

Un lavado de estimado después y la vida cambia de manera drástica, el giro que te daba la droga ahora te la da la vida y ves las cosas de una manera diferente sin necesidad de estar bajo influencia de estupefacientes.

La misma percepción de la vida te esa sensación de que quizás lo que te pasa es cosa de algo que no comprendes o que al menos no deseas comprender y por eso decides refugiarte en las drogas.

No sufro de abusos, de ningún tipo realmente, mi madre es maestra y mi padre es un abogado, no tengo hermanos ni hermanas, hija única de padres que siempre están trabajando. Ahora que lo pienso quizás la soledad fue un factor que me afecto en mi niñez.

Una niña que era vigilada por una chica novata que tuvo que mentir en su solicitud para poder tener un trabajo aunque sea mal pagado, no digo que mis padres sean tacaños, solo digo que se niñera no era un trabajo del todo remunerado, al menos no bajo el punto de vista de la chica que me cuidaba.

—¿Puedes hablar?

¿Qué clase de pregunta era esa? Claro que podía, solo que no había ningún tema para hablar, siempre te la pasas en tu celular, gastas el agua de mi casa y no compras nada con el dinero que te dejan para mí.

En fin mi niñez fue triste, mi único amigo era el vecino de enfrente, un tal Brandon, siempre fue tímido y poco sociable, jamás pensé que sería un gran amigo. Nuestros padres se conocían, eran vecinos después de todo, dejaban que jugáramos en el patio, a veces bromeaban con que seriamos pareja, supongo que era algún tipo de juego entre adultos que parecía divertido.

El no era un mal niño, tenia un hermano mayor el cual se cambio de escuela por problemas de comportamiento, no era mal tipo, solo que estaba un poco malcriado, al final nunca supe que fue de él, quizás lo vendieron o lo dieron en adopción, Brandon nunca hablo al respecto, solo menciono que se había ido a una nueva escuela.

En fin, creo que es un buen inicio para mi este año, 6 meses en rehabilitación y Brandon me hizo una fiesta para celebrar no solo mi recuperación sino el hecho de que tenia 25 días sin consumir nada. Se que les debo un poco de contexto al respecto, pero iremos por partes, nada es mas molesto que una historia apresurada. Me llamo Alexa, apellido Fernández. Este es mi diario.