꧁The Bad Choises Game꧂ (Michael Afton Y Tú)

꧁Jhonny꧂

—No te metas en mis putos asuntos, Elena.

—¿Acaso crees que es lindo para nuestros hijos verte borracho? ¿Saber que estuviste con una puta mientras decías estar en el trabajo? Eres un infeliz.

Estabas cubierta bajo el cálido abrigo de las frazadas en la cama mientras escuchabas música de tu walkman con el cuerpo fijo en la existencia pero la mente sumergida en aquel último cassette que te habían regalado de Bonnie Tyler. Esa era la única manera de escapar de una cruel realidad que enredaba los pies para que nadie pudiese dar ni un solo paso a su corazón. El olor a cigarro invadió tus fosas nasales, obligándote a salir de el acogedor abrigo de las fibras de algodón y quitarte los audífonos.

—Creí que estabas en el taller...—dijo Jhonnatan mientras exhalaba el cigarrillo que fumaba con tanta tranquilidad— Veo que te gusta mi regalo... Me alegra que te guste.

—¿Podrías apagar tu cigarro?

—Cierto que esta habitación es espacio anti-humo —tan pronto abrió la ventana y exhaló la última calada de humo, arrojó la colilla lo más lejos que pudo.

— Me lastimé con un soldador mientras arreglaba al grandulón. El profesor me mandó a casa y ya sabes, el mismo escenario de siempre.

—Mamá estresada por el trabajo y papá borracho y con olor a zorra.

—Exacto.

—Cuando llegué, papá se estaba yendo con unas cosas en mano, supongo que esto será lo último que sabremos de él.

—Cuando termine con mi grandulón... Lo venderé para tener dinero... Y darle a mamá una vida digna.

—¿Ya piensas venderlo?

—Tomará unos cuantos años terminarlo, pero te juro que nos dará una muy buena ganancia. Esa cosa renovará todo

—No seas idiota. ¿Trabajaste con esa mierda y seguirás trabajando durante tantos años para que unos idiotas te lo compren? ¿No aprecias tu propio trabajo?

Simplemente te encogiste de hombros mostrando indiferencia ante su comentario.

—No es que no lo aprecie, Jhonny... De hecho, lo amo más que a mi propia vida... Pero amo más a mamá.

—Cursi de mierda.

—Tu puta hermana.

—Tu eres mi única hermana. Imbécil.

— Lo sé —canturreaste mientras le guiñabas el ojo con sarcasmo. Un almohadazo de su parte llegó a tirarte a la cama, obviamente en forma de juego.

—Ya no podré ir a la escuela técnica —una mirada sombría se plasmó en tus ojos y Jhonnatan entendió rápidamente el porqué. Sin un padre en la casa, no habría suficiente dinero como para mandar a uno de sus hijos a una escuela tan cara para superdotados.

—No quiero que sea una basura estar en la escuela conmigo. Sé que intentarán hacerte sentir como mierda porque eres mejor que ellos, así que pase lo que pase, quiero que me cuentes todo a mi y a mis amigos. Si se meten contigo, se meten con todos nosotros. —quedó pensativo por unos segundos y se sentó a tu lado con energía— Te los presentaré mañana, y no es una opción, es una obligación.

—¿En serio no tengo forma de negarme?

—¿Estás sorda o eres sólo estúpida?

—Un poco de esto, un poco de aquello...

El chico se levantó de la cama y se dirigió al umbral de la puerta, tocando con suavidad el interruptor de la luz; antes de tocar para apagar la iluminación se detuvo y miró a su hermana, alejando la mano de esta.

—Descansa... Piojosa... —fueron sus últimas palabras antes de irse, dejándote nuevamente en el sobrio vacío de la habitación.

Guardaste el cassette en el estuche, mirándolo con una pequeña sonrisa gracias a los hermosos recuerdos que te traía del primer momento en el que lo tuviste en manos. "Mañana será otro día" murmuraste en tono bajo antes de acomodarte en la cama e intentar dormir.