COMPLICATED (2WON)

009

Era una relación extraña. Eran algo así como sex pals, si se veían solos era sólo para esos asuntos y luego volvían a verse con todos los demás. Dado que la relación de Hyungwon con los amigos de Shownu siempre fue muy buena, el mayor no volvió a cuestionarle nada.

Ahora que se encontraba nuevamente en casa de Wonho, era extraño. Habían quedado en solo ver alguna película o algo, y justo eso hacían hasta que pareció aburrirles y jugueteaban entre sí. Eran cosquillas, o pequeños piquetes en las costillas o cualquier juego de infantes. Era algo gracioso verlos.

—Mis costillas, ya duele, posiblemente mañana tendré una gran mancha.

—Te quejas muy rápido, ¿alguna vez me queje de las manchas que dejas tu en mí?

—No me estaba quejando. Quizás si no me gustaras tanto, ya lo habría hecho y te hubiera dolido más a ti. —Luego de la palabra tanto, dejó de escuchar. Lo miró unos segundos, resopló y se puso en su regazo aprovechando que el mayor estaba recostado. Este último, puso sus manos sobre los muslos del menor.

—¿Qué dijiste?

—Que no me estaba quejando. — Hyungwon tomó los brazos del mayor y jalo para poder sentarlo.

—Después de eso. —Luego de más esfuerzo, consiguió que Wonho terminara sentado, así que sus brazos los pasó por el cuello de este.

—¿Qué? ¡Ah! Eso.

—Dilo.

—Si no me gustarás tanto...

—Me gustas. —Wonho se esforzó en no soltar su sonrisa completamente y volvió a poner sus manos en los muslos del contrario.

—Me gustas.

—¿Te gusto? — Wonho asintió y soltó un "mhm", entonces Hyungwon se abalanzó y junto sus labios, cosa que inmediatamente hizo que Wonho pasara sus manos por la espalda del menor. El beso fue terminado pero pequeños picos seguían siendo entregados en la boca de Wonho. No se separaban, sus bocas se tocaban pero no se besaban. — Vuelve a decirlo.

—Me gustas.

—Me gusta como suena. Me gustas.

—Me gustas.

—Lloraré. —Una carcajada salió de Wonho y entonces Hyungwon, deteniéndose con sus manos tras el cuello del contrario, echó su cabeza hacia atrás y fingió sollozar.

—¿Por qué?

—Porque somos un gusto compartido. —Cuando Hyungwon se incorporó, junto más sus cuerpos y su cabeza terminó enseguida de la de Wonho, formando un abrazo. —Ya sabias que me gustabas.

—Y tú también.

—Dijiste que ya no te sentías así.

—Tenía miedo.

—¿De qué?

—De que te arrepintieras.

—¿Por qué lo haría?

—Te veías muy trastornado al saber que te besé.

—Y ahora no puedo dejar de besarte, santo Dios. — Wonho lo empujó ligeramente para separarlo y volver a besarlo.

Como alguna vez alguien dijo: que dos personas se gustaran al mismo tiempo, era un milagro. Y este, era realmente uno.

•

Era cumpleaños de Shownu, lamentablemente, la clase de Hyungwon debía presentar un examen algo importante, pues se trataba de la simulación para un examen de habilidad. Shownu le había dicho que no tenía de qué preocuparse y menos siendo simulacro, pero ¿quien lo decía? El veinteañero que está apunto de terminar la carrera, ya ni siquiera recordaba lo que era de seguro.

La música y las voces eran ruidosas, pero aún así lograba ligeramente poner atención. Su puerta de madera, por más sorprendente que se escuche, amortiguaba con éxito el ruido, ademas, tenía audífonos con él.
El sonido se intensificó, lo que significaba que la puerta de su cuarto había sido abierta. Cuando volteó su cabeza, Kihyun se encontraba ahí parado, mirándolo con una sonrisa.

—¿Qué hay, Ki? ¿Podrías cerrar la puerta? Estoy estudiando. — Kihyun lo obedeció y se acercó a él poniendo sus manos en sus hombros, meciéndolo ligeramente.

—Aligérate, baja un rato, no te perderás de mucho, es más, yo te ayudaré a estudiar después.

—¿Quién te envío a convencerme?

—Yo solo vine. Haz caso a tu mayor y baja. —Hyungwon tenía pegada su vista al libro frente a él, en donde dio vuelta de pagina y resopló.

—Literalmente eres cuatro años mayor solamente.

—¡Es casi un lustro!

—Sal de aquí, Kihyun, mañana lo felicitaré. —Kihyun bufó y se alejó.

—Si cambias de idea, claro que sabes dónde estamos. —Hyungwon asintió sin despegar su vista, entonces escuchó la puerta cerrarse. Iba a poner sus audífonos pero ligeros murmullos fuera le llamaron la atención.

—¡Tú! ¡No! Si no le hizo caso a Kihyun, ¿crees que me hará a mí?

—¡Eres su hermano!

—¡Me mandará al carajo por eso mismo!

—Ya, infantes, iré yo. Parece que le tienen miedo, bajen, yo lo convenceré. —Dado que se trataban de voces muy bajitas, no había descubierto de quien se trataba esa ocasión, pero se las olía. Luego de unos segundos, la puerta nuevamente se escuchó y una vez más, indicando que alguien había entrado y había cerrado la puerta tras de él.

—No, Jooheon, no bajaré. —No obtuvo respuesta, así que cuando iba a voltear, unas manos detuvieron su cabeza. Estas, bajaron desde ese lugar, por todo su cuello hasta terminar en sus hombros, al igual que Kihyun. Su piel se había erizado, pero nada que ver, con el erizamiento que apareció cuando sintió unos labios plantar un par de besos sonoros detrás de su oreja, haciéndolo reír y encoger esa parte de su cuerpo. —No bajaré.

—Me la debes. —Otro par de besos hicieron un camino hasta el puente del cuello.

—¿Por qué?

—Porque me acabas de llamar Jooheon. —Hyungwon logró voltearse, con una pequeña risa en su rostro. Era obvio que le había llamado así a propósito.

—¿Y es ofensa o qué?

—No, pero me pongo celoso. —Una carcajada salió de Hyungwon. Volteó la silla en la que se encontraba, así que el mayor se puso en cuclillas y puso sus manos en las piernas del menor. Hyungwon colocó sus manos en los hombros del contrario y se acercó a dejar un beso.

—Siendo que eres el único que ha logrado hacerme alejar de mis libros, no deberías.

—Me siento honrado.

—¿Estás seguro que no están aquí afuera?

—¿Me crees tan estúpido como para no asegurarme yo mismo de que bajaran? Además de que le puse el seguro. —La sonrisa de Hyungwon se amplió y luego se apagó de inmediato, incluso, alejando sus manos.

—Si nos tenemos que esconder, significa que está mal. —Las manos de Wonho fueron a dar al rostro del más alto, acariciando sus mejillas.

—Yo mismo le diré cuando tenga la oportunidad.

—Ahora lo es.

—Ahora es su cumpleaños, Wonnie. —Hyungwon tragó hondo y bajo la atención de sus ojos. — Bajemos un ratito, ¿si? —Wonho comenzó a contornear los labios ajenos, hasta que este se abalanzó y dejó un beso en sus labios.

—No, y diles que te golpeé. —Las manos de Wonho abandonaron la cara de Hyungwon en contra de su propia voluntad, así que Hyungwon, escondiendo una pequeña risa, volvió su vista a las hojas.

—Bien, espero no hayas fumado nada para esto. —Una risa de Hyungwon se escuchó, sin embargo, no volteó. —Te quiero. —En el estómago de Hyungwon apareció todo un zoológico pero no hizo nada más que quedarse en la misma posición, hasta que escuchó que Wonho se alejaba.

—También te quiero, guapo.