Capítulo 7

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Habian pasado ya dos meses desde que comence a trabajar en la empresa, queria saber si la persona frente a mi era el William que buscaba pero por mas señales que dejaba escapar no podía llegar a una conclusion asi que ese dia me dispuse a dar el ultimatum.

Entre a su oficina y deje unos documentos en su escritorio, el sin embargo estaba concentrado en su laptop asi que aproveche y deje el broche sobre los documentos, sali y me sente en mi escritorio esperando impacientemente a que se diera cuenta.. A los pocos minutos salio efectivamente con el broche en su mano.

-Señorita Brown le pedire de favor que cuide sus pertenencias personales... No me agrada la idea de estar cuidando pertenencias ajenas.-me reprendio con una expresión insignificante

-ah... Lo siento... Ese broche me lo regalo un viejo amigo.

-No le pedi explicaciones, solo vine a devolverselo- me interrumpio friamente, despues de eso salio rumbo al elevador, me sentia un poco decepcionada aunque era algo que ya veia venir sabia que no era el William que esperaba pero como todos dicen la esperanza es lo ultimo que muere asi que deje pasar ese tema convenciendome de que era una locura seguir pensando en eso.

El dia de hoy la corporación celebraba su aniversario y todos en la empresa estaban entusiasmados por el festejo que harian, mandaron hacer un buffet en grande con comidas variadas y mucha bebida, no soy amante de las bebidas a decir verdad nunca me eh embriagado pero.. Me gustan los festejos por lo que al terminar mi horario tome el ascensor para llegar al 2do piso que era donde seria la celebración, estaba llegando al 3er piso cuando note que habia olvidado mi telefono en mi escritorio y lamentablemente tuve que regresar, tome nuevamente el ascensor despues de tomar mi telefono estaba perdida en la pantalla del mobil revisando algunas notificaciones asi que nisiquiera me habia dado cuenta que alguien se habia subido despues de mi

-Asi que nos volvemos a encontrar.... Marlene...

Una voz familiar resonó en la cabina metalica lo cual hizo que mi atencion se enfocara en la persona que hablo. Un chico rubio de ojos color miel y piel palida estaba frente a mi mirandome... Se acerco lentamente arrinconandome un poco mas a la pared de metal que se encontraba tras mi espalda

-Usted....

-Asi es.. Soy William Rosenblum... Aquel "niño" con el que jugabas en el bosque en arizona...

Mi fuerza se desvanecio a tal punto que deje caer mi telefono, justo frente a mi se encontraba la persona que mas queria ver de nuevo, aquel niño que me ayudo en los momentos mas dificiles y con quien pase ratos muy agradables, despues de 17 años lo habia encontrado nuevamente... En una forma muy diferente... En una ciudad distinta.

-Pero usted... Sus ojos... Eran un tono muy oscuro- cuestione sin creer lo que incluso mis propios ojos me estaban mostrando.

-Si, lo se... Uso lentes de contacto porque me molesta la luz excesiva - dijo esto ultimo con tono asqueado y ahi estaba nuevamente el niño frio sin expresiones.

Senti una gran cercania en ese momento tanto que mi corazon tambien sintio un gran alivio, sin importarme nada en ese momento lo abracé, el sin embargo se mantenia firme no dijo ni una palabra pero por la tension de sus musculos sabia que estaba incomodo... Le solte

-Lo siento... Yo.. Me deje llevar por la emoción del momento- solte una risita nerviosa

-Los humanos suelen dejarse llevar facilmente por sus emociones...-respondio por lo bajo

-Perdon? - lo mire extrañada no alcance a escuchar todo pero la palabra "humano" saliendo de el se escuchaba muy menospreciante.

-Iras al festejo de la corporacion?-pregunto evadiendo el tema

-si... Creo que ire un rato para despejarme- respondi sobandome la nuca mientras recogia mi celular del piso

-Valla... No crei que te generará tanto estres señorita Brown.

Si el sarcasmo fuera un idioma no cabe duda que william seria su nativo. Estaba a punto de reprocharle cuando la puerta se abrio y William salio sin permitirme decir nada..."valla... que hijo de puta se ah vuelto".

Baje al festejo y ya la mayoria de los que laboramos ahi estaban comiendo, platicando algunos incluso brindando, busque con la mirada a William pero no lo hallaba por ningun lado. Me acerqué a la mesa de comida y comence a deborar todo con la mirada, era exquisito todo lo que se encontraba en ella, tome un par de bocadillos y me quede parada en una esquina.

-¡¡ Hey Marlene !! ¿Porque estas aqui tan sola? Estaba buscandote desde hace un rato pero no te encontraba

-Acabo de bajar, habia olvidado mi telefono en mi despacho- respondi desganada

Marc era un chico que trabajaba como jefe en el area de logistica y el cual se aferra a salir con migo desde hace un mes, es como un chicle pegajoso a mas no poder y es un poco frustrante para mi ya que me lo eh topado "ocasionalmente"  hasta en el maldito baño...

-Oye que te parece si este fin de semana vamos a algun lado, tengo que comprar un regalo para mi abuela y queria tener un punto de vista femenino... ya sabes.

-¡Hola chicos!- se acerco amigablemente vianey y tomo del brazo a Marc. Vianey es mi mejor amiga la cual quiere algo mas que amistad con Marc... Si, esto es un triangulo bastante estresante.

Comimos algunos bocadillos de la mesa y bebimos un par de copas, esa noche no vi por ningun lado a William.. Debia ser el primero que estuviera ahi ya que es su empresa pero no, no lo encontre por ningun lado.

Se llegaron las 12 de la noche y yo ya estaba aburriendome de las tontas bromas de Marc la risa finjida de Vianey por querer encajar con el y el ruido alto, asi que decidi retirarme a casa, tome un taxi y disfrute de la vista nocturna de la ciudad la cual amo tanto, llegue a casa despues de un rato, tome una ducha y me fui a dormir, hoy como siempre estaba muy cansada pero por dentro tenia una chispa de felicidad por volver a encontrar a William.

Eternal LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora