- Cómo fingir no conocerte, si se absolutamente todo de ti, creeme no puedo hacer eso, mi amor por ti no lo permite.- 🌙
Un accidente los separa.
Él llora su pérdida.
Un hombre hará todo por tenerla, ¿hasta donde podría llegar una obsesión?
NO SE AC...
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-. Podría describir, ¿Como se a sentido esta semana, Señorita Manobal?- Sostenía su bolígrafo en su mano derecha, mientras su libreta en en sus piernas, adornadas por una falda.- Dígame lo que quiera, ya sea...lo que desayuno esta mañana, o lo que hizo ayer.- Su psicóloga intentaba que ella hablará, sin embargo, Lisa seguía perdida en sus pensamientos.- Bueno...¿Te gustaría un café?- Preguntó amablemente.
-. Si... - Dijo, en un suave susurró.
Asintio contenta, y se levantó para hacerlos.- Sabes, esta mañana me parece muy bonita, me encanta el poder ver la luz del sol, y poder sentir el aire en mis pulmones, hacía mucho tiempo que, nunca me detuve a pensar, en esos pequeños detalles. - Agrego la azúcar y giró a verla.- ¿Leche?- Lisa, asintió. - Desde que, mi hija murió, pensé que yo también había muerto a mi, fue difícil, realmente difícil. Poder superar...algo tan doloroso.- Tomó las dos tazas y se acercó a ella, para darle una. Lisa la observaba detenidamente, ahora si la veía.- Sin embargo, pase tres años en la oscuridad... intentado morir, lo intenté dejame decirte,pero; ella no me dejó... siempre lo evitaba.- Un sorbo paso por sus labios y luego por su garganta, sus ojos estaban llenos de brillo.- Sabía que, ella me veía, y debía hacer lo mejor, tenía que...soltarla, aprendí a vivir con eso, aprendí a vivir con mi dolor, con mis traumas; y aunque, crei que jamás se irían.- La miró y Lisa tenía retenidas sus lágrimas. - Se fueron...una, por una.- Dejó su taza y se acercó a ella, tomó sus manos entre las suyas y después sonrió tan dulcemente. - Será difícil, pero no imposible, Lisa.- La mencionaba sollozo, y ella la abrazó, dándole reconfort. Esta era su tercera sesión, y al fin, podía hablar. Con el siemple hecho, que le haya aceptado el café.
Ya era un logró para ella.
Después de que ella le siguiera contando cosas divertidas de tu su vida, le habló de cómo se sentía de feliz últimamente, su otro hijo mayor la había hecho abuela, y ella amaba con locura a su nieta, sentía que su vacío había sido llenado. Lisa tomaba su vientre con tanto reconfort, ella estaba a salvo; junto a su bebé. Al final la sesión le dio un gran abrazo a su psicóloga y ella sonrió tiernamente, se despidió y Jisoo la esperaba.
-. Vaya, hoy te vez radiante Lisa.- Jisoo la recibió con un abrazo, y un beso en su frente.- ¿Quieres comer algo? ¿Que te gustaría a ti? Aww y a la hermosa bebé.- Se agachó y besó la barriga de siete meses.- Deberiamos comprarle ropa, ¿Te parece?- Lisa asintio, Lisa no hablaba absolutamente nada. Desde que la encontraron, no mencionó nada, solamente cuando declaró, que había sollozando tanto, que hasta los policías se sintieron mal de ella.
El trauma generado por una persona egoísta, dejó una huella en ella, y el resultado de soltar ni una sola palabra después.
Caminaron agarradas de la mano, mientras veían ropa, y Jisoo feliz le compraba a su sobrina, la llevó a su restaurante favorito, le compró lo que quiso de comer y después un helado, para satisfacer su antojo de embarazada.
