AGENT - TL

⚔Chapter two⚔

Se escucha una estática ruidosa en mi auricular derecho por unos segundos hasta que le doy unos golpes con el dedo, intentando disminuirla.

—¿Funciona? —la voz de Jackson se oye, dejando la estática como un zumbido suave de fondo.

—Lo hace como porquería pero sí —respondo, dándome la vuelta hacia él, que esta sentado delante de la computadora junto un micrófono por el que recién acababa de hablar.

—Es lo mejor que hay.

Lo sé muy bien. Estamos usando equipo viejo que nadie en la agencia usa desde hace tiempo. Hubiera estado buenísimo conseguir equipo del nuevo, pero está muy lejos de nuestras manos. Incluso las de Jackson, quien debería tener un favoritismo por ser el hijo Wang.

Pero esto es mejor que nada.

—¿Estas lista? —pregunta, poniéndose unos auriculares.

—¿Cuándo no?

No responde, pero me ofrece una sonrisa que le devuelvo.

En poco tiempo conseguí un cómplice del crimen... o un cómplice que me ayudara a detener uno.

Miro mi reflejo en un espejo que hay dentro de la camioneta y todo está bien.

Mi pelo anaranjado me llega hasta la cintura. Acomodo mi short de fiesta junto la blusa de brillos, paso mi mano por la chaqueta de cuero negro y estoy lista.

Salgo por las puertas traseras sin llamar la atención, aunque el estacionamiento que elegimos este parcialmente vacío.

Camino sin apuro por las calles que me llevan al bar, saco un celular justo cuando dos tipos pasan por mi lado y chiflan, que asco. Lo miro lo peor que puedo pero después los ignoro. En estos momentos solo soy una chica que va a disfrutar de baile y alcohol. 

En la puerta saco mi entrada vip dándosela al de seguridad que me deja ingresar sin mas rodeos, doy tres pasos a lo oscuro, paso por una extensa cortina que separa el interior del afuera y es un mundo distinto.

Hace calor, las luces van y vienen, gente bailándose entre si entre roces, y la música suena al tope mientras camino entre la gente. Pido un trago con hielo y me dirijo a la parte superior de Llamelet. El tiempo parece no transcurrir aquí dentro.

—Taehyung esta por llegar en cualquier momento, será mejor que te apures  —me advierte Jackson—. No queremos mala imagen con él.

Uy, uy, uy.

Me aseguro que no haya nadie a mi alrededor mirándome, y es ahí cuando lo veo, moviéndose entre la gente con un traje azul para nada camuflado.

—Hecho.

Subo unos escaloncitos, manteniendo la mira en mi objetivo, le ofrezco una sonrisa coqueta en cuanto cruzamos miradas, pero no se detiene por mi. Parece preocupado para haber evitado a una mujer, y no lo culpo, yo se que le preocupa.

Es a él a quien estaba esperando. Uno de los miembros importantes de toda la importación de droga de la ciudad. Muy estúpido por haber venido en las circunstancias que se encuentra, seguro cree que todos los que trabajan para ellos le son fieles hasta morir. Pero yo se que no, al menos Ben no lo era, y el si que sabia mucho luego de interrogarlo a solas.

Sigo a Seb hasta el guardaropa cuidando mis espaldas mientras no dejo que me vean.

El pasillo está vacío, iluminado por luces violetas, el suelo de mármol brilla más que nada haciendo ver el lugar elegante siendo una porquería.

Asomo mi cabeza por la entrada de la puerta, veo siluetas de hombres entre las prendas colgadas.

Camino silenciosamente, ocultándome entre más prendas de ropa y escucho un grito que hace sobresaltar mi corazón.