Looks that kill ‣ SixxLee

OO1

Nikki estaba sentado en césped fuera de la casa que compartía con Tommy, admiraba las estrellas con una sonrisa pintada en sus labios, le transmitían mucha paz y tranquilidad. Su menton descansaba en la palma de su mano derecha, estaba tan perdido en el hermoso cielo que no se dió cuenta de que Lee se encontraba sentado a su lado mirándolo de una manera casi nada inocente. Sixx ladeó su cabeza en dirección a Tommy, esto en cuanto se dió cuenta de su presencia, su mirada le ponía tan nervioso.

― ¿Que pasa, Tommy? ― Lee ni si quiera reaccionaba, solo lo miraba con esa mirada que transmite muchas emociones, pero no emociones negativas. ― Amor, deja de mirarme así ― Desvío su mirada nervioso y con las mejillas coloradas, el más alto de los dos se levantó del suelo y se metió a la casa.

Nikk se levantó y caminó hacia la puerta de la casa, Tommy estaba en el sillón viendo televisión entretenido en los suyo, a sus ojos Lee era tan pero tan sexi. Sixx fue y se sentó en el sillón junto con el más alto reposando su cabeza en su hombro; en seguida llevó su mano a los cabellos Nikki quien se removió cómodo. Tommy no le prestaba nada de atención a la pantalla frente a él, si no que su mirada estaba barada en los casi rojizos labios de su pareja, estaba su mirada era seria pero tenía su lado casi sensual.

Nikki obviamente sintió una mirada puesta en el, por lo que levantó su mirada hacia el rostro de Tommy, estaban a sólo unos minutos de distancia, podían sentir sus respiraciones perfectamente, los omóplatos de ambos estaban conectados, Nikki no podía esperar más, apegando sus labios a los de Tommy. La mente de Tommy se volvió neblina, donde lo único que podía captar era el calor del cuerpo de su novio, el beso era tan pasional. Es el beso de la boca que provoca, que roza, lame, acaricia, muerde y se apropia de el deseo mismo, de la encarnación amada que se derrite y se hace agua en los labios que se lanzan por él. Se separaron del fogoso beso, Tommy se percató del leve color carmesí en las mejillas de Nikki, quien aún seguía mirándolo ido en su hombro.

― ¿Vez lo que me hacen hacer tus miradas Tommy? ― Dijo Nikki nervioso aún, poniendo sus brazos en el cuello de Lee quien enarcó una de sus cejas.

― No es mi culpa ― Se defendió Tommy llevando su mano a la espalda baja de Nikki quien negó cerrando sus ojos. Sixx se puso a acariciar el cabello de Lee quién seguía mirándolo.

― Si es tu culpa, siempre me miras tentandome a cosas que no puedo controlar ― El más alto arqueó una ceja acercándo su rostro al cuello de Nikki, este se alarmó.

― ¿Que cosas no puedes controlar, amor?

― ¡Tommy!, deja de ponerme nervioso.

Las dos miradas se encontraron, ambos unieron sus labios en un beso (nada) inocente, Nikki se sostenía de los cabellos de Tommy quien se reía porque él quería que sus cuerpos se acercasen más.

― Nikki cariño, calma ― Dijo Lee con dificultad entre el beso, mientras sostenía la cintura de Sixx, el cual ahora tenía un color rojizo más fuerte en sus mejillas y sus pupilas estaban dilatadas. ― Dios, Nikki.

― ¿Que ha-haré?

― Nada hermoso, se que va a dolerte, pero llegué cansado del trabajo y. . .

― No importa, Tommy vamos a dormir, mañana tienes que ir a trabajar temprano y estoy dispuesto a levantarme más temprano para darte el desayuno que te mereces.

― Que lindo eres. . .

― Deja de alagarme tanto y vamos a dormir,  tontin.

― ¡Bien!, bien. . .

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