Ella que se ama solo a sí misma

Capítulo 10

Un murmullo irritado recorrió la audiencia recién formada. Eran las diez y media y Shikamaru Nara aún no había llegado a la zona baja del estadio donde estaba programado su partido. Sin embargo, los estruendos eran más parecidos a gritos en un área particular de la arena. Esto se debió al hecho de que el Nara ausente estaba habitando las gradas más al norte de los asientos. Peor aún, apenas respondía a las burlas y quejas de las personas que lo rodeaban. En cambio, simplemente estaba apoyado en la barandilla con una clásica expresión de aburrimiento plasmada en su rostro.

"Baja ya. Se callarán si lo haces" Naruto, que estaba sentado unos metros a su izquierda, lo instó. El usuario de la sombra suspiró y miró hacia la arena, donde Temari y Genma lo esperaban con impaciencia. Luego se rascó un lado de la cara pensativamente.

"Realmente no tengo ganas de hacer esto" murmuró abatido. Antes de que pudiera pensar más, Naruto lo levantó por detrás. Mientras estaba suspendido en el aire, Shikamaru pateó sin ningún efecto.

"¡¿Qué demonios estás haciendo?!" exigió, con los ojos muy abiertos cuando Naruto lo colgó sobre el borde de la barandilla por la parte de atrás de su cuello. La multitud detrás de los dos chicos expresó su aprobación en voz alta mientras el rubio aflojaba lentamente la camisa de su camarada.

"Haciéndote participar. Estoy harto de todos estos gritos. Diviértete, amigo" respondió Naruto mientras soltaba a Shikamaru antes de que cualquier otra protesta pudiera escapar de la boca de Nara. Un chillido sorprendentemente femenino salió de Shikamaru mientras caía en picado hacia el suelo. Naruto ahogó una risa cuando su compañero golpeó el suelo con un "golpe sordo".

"¿No crees que eso fue un poco duro?"

El rubio miró por encima del hombro para encarar la voz familiar que acababa de interponer. El dueño de dicha voz era Kakashi, quien acababa de llegar a las gradas del estadio. Naruto se encogió de hombros y volvió su atención al suelo de la arena.

"Habría habido un motín si no le hubiera dado un poco de aliento" se justificó con indiferencia. El jonin suspiró y se sentó junto a su descarado alumno.

"Difícilmente llamaría a eso estímulo. Más como asalto", dijo mientras se acomodaba en los asientos promedio de la sección de plebeyos. Antes de que cualquiera de ellos pudiera comentar sobre el partido que estaba programado para comenzar, un sonido de estruendo vino desde abajo. Después de un momento de confusión, lo que había ocurrido quedó claro. Aparentemente, habiendo sido empujada más allá de los límites de su paciencia, Temari había desatado una ráfaga de viento infundido de chakra con un golpe de su abanico. Una gran nube de polvo había sido arrojada al aire por el ataque.

"Espera, ¿es eso legal? No creo que el partido haya comenzado todavía" preguntó Naruto mientras la multitud miraba con anticipación. Kakashi sacudió el frente de su chaqueta antibalas.

"Debería serlo, pero no creo que a Genma le importe tanto. Nada le gustaría más que estas peleas terminaran lo más rápido posible. El arbitraje apesta. Confía en mí", respondió. Naruto le dio una mirada desconcertada.

"¿Qué te hace decir eso?" preguntó con escepticismo. Su sensei hizo un gesto hacia la arena, donde el polvo había comenzado a disiparse. El supervisor se había alejado del centro del estadio y ahora observaba a los dos genin desde lejos.

"¿Así que solo está dejando pasar eso? Me parece injusto" gruñó Naruto cuando Shikamaru corrió hacia su izquierda para evitar ser destrozado por otra ráfaga de viento. Kakashi hizo una mueca cuando el genin desmotivado tropezó y cayó de lado con fuerza.

"Llegó tarde al partido, así que supongo que este es su castigo. No es que cambie mucho las cosas. Así es como esta pelea siempre se vería desde el principio", dijo. Naruto frunció el ceño ante la segunda mitad de la declaración.